Entrevista

Jordan Peele firma su película más alienígena con '¡Nop!': "Siempre intento convertir una premisa absurda en algo realista"

El director  de 'Déjame salir' presenta su tercera película, una sátira sobre la obsesión por captar "la imagen imposible" cargada de caballos, nubes y un terrorífico mono.
Jordan Peele durante el rodaje de '¡Nop!'
Jordan Peele durante el rodaje de '¡Nop!'
Cinemanía
Jordan Peele durante el rodaje de '¡Nop!'

¡Nop! es una de esas películas que nos ponen en un brete a los periodistas de cine. Una de esas películas sobre las que es difícil escribir. Primero, porque es de Jordan Peele. Y si has visto alguno de sus anteriores filmes, tanto su electrizante debut Déjame salir (2017) como Nosotros (2019), ya sabes que cuanto menos sepas, mejor te lo vas a pasar. Segundo, y no menos importante, porque es una película tan alienígena que es difícil contarla echando mano del limitado lenguaje humano.

Intentémoslo. OJ (Daniel Kaluuya, con el que Peele se reúne por primera vez desde su ópera prima) y Emerald Haywood (Keke Palmer) son dos hermanos que entrenan caballos para rodajes en Hollywood. Sus vecinos tienen un parque temático de la fiebre del oro. Su dueño, Ricky ‘Jupe’ Park (Steven Yeun, Minari), que parece un personaje de Tarantino, fue un famosísimo niño actor con un pasado televisivo traumático que es, probablemente, lo mejor de ¡Nop!

En sus ranchos empiezan a pasar cosas raras. Hay nubes que permanecen inmóviles durante semanas y objetos de lo más variopintos caen del cielo con muy mala leche. Mejor dejamos que sea el propio Jordan Peele, que nos contesta con extrema amabilidad desde Los Ángeles, el que ponga orden en esta secuencia de sucesos paranormales.

Durante la promoción de Déjame salir dijiste algo muy interesante: que habías escrito esa película para ti mismo. ¿Ha sido el caso de ¡Nop!? ¿La has escrito para ti mismo? ¿Es esa la mejor manera de escribir películas? Es el mejor punto de partida. Escribir la película que desearías que otro hubiese escrito para que tú pudieses verla. Yo soy fan absoluto del cine de extraterrestres y ovnis y deseaba que hubiese un filme que fuese la quintaesencia del cine de terror de alienígenas.

Daniel Kaluuya en un fotograma de '¡Nop!'.
Daniel Kaluuya en un fotograma de '¡Nop!'.
Cinemanía

Hablando de ovnis... Los personajes de ¡Nop! reflexionan sobre lo difícil que resulta capturar en imágenes estos objetos voladores no identificados. ¿Es algo con lo que habéis tenido que lidiar como cineastas tú y tu director de fotografía Hoyte van Hoytema? Sí. Hoyte es uno de los mejores colaboradores. Muy al principio del proyecto nos planteamos cómo afrontar esta dificultad. Fue muy meta. Porque los personajes en la película se preguntan cómo filmar los ovnis y eso mismo le pregunté yo a Hoyte. Le pregunté: “Si te contase que hay un ovni en el jardín de mi casa y te preguntase cómo filmarlo, ¿qué cámara usarías para capturarlo para la posteridad?”. Y él dijo: “Una cámara IMAX. Por su resolución”. Me explicó que hay una razón por la que se usan estas cámaras en el espacio. Es la mejor forma de fotografiar esos lugares. Así que rodamos una gran parte de la película en IMAX.

Hay momentos en ¡Nop! en los que es inevitable pensar en Encuentros en la tercera fase, de Steven Spielberg, e incluso en El resplandor, de Kubrick. En Déjame salir también había referencias a otras películas, Las esposas de Stepford y La semilla del diablo. ¿Estas referencias son para ti una forma de rendirles homenaje a cineastas a los que admiras? Sí. Sobre todo porque yo he aprendido a hacer películas viendo otras películas. Así que me encanta rendirles homenaje a los cineastas de los que he aprendido. En ¡Nop! hay otra fuente de inspiración clarísima que es Paul Thomas Anderson, que es uno de los cineastas que mejor construye todos sus personajes: todos tienen la misma profundidad que el protagonista. Es uno de los mejores cineastas que tenemos.

También hay en ¡Nop! algo de Tarantino en la descripción que haces de la industria de Hollywood. Gracias. Entiendo por qué los cineastas hacemos películas sobre la industria. Hay un momento en tu carrera en el que eso es tu vida, es lo que mejor conoces. ¡Nop! es muy autobiográfica de muchas maneras. En ella cuento mi experiencia haciendo películas.

Otro director en el que es inevitable pensar es David Cronenberg, sobre todo en la secuencia de la abducción. Eso que dices es un superhalago para mí. Me encanta Cronenberg. La mosca es una de las películas que cambió mi forma de ver el terror. La vi cuando tenía 11 años y me obsesionó. Y me doy cuenta de que no hablo lo suficiente de ella. Pero fue fundamental en mi vida.

'¡Nop!'
'¡Nop!'
Universal

En los últimos años hemos visto películas de ciencia-ficción en las que los extraterrestres eran buenos, como por ejemplo La llegada. ¿Crees que tal y como están las cosas en el mundo ahora, con Putin, la pandemia, etc., tiene más sentido hacer películas en las que los aliens sean malos? Me resulta difícil distinguir entre el bien y el mal llegado este punto. No sé si lucharía contra los aliens si viniesen y fuesen malos. Quizás sería el único que me uniría a ellos y lucharía contra la especie humana. Pero sí que es cierto que escribí esta película en 2020 cuando había muchas cosas sucediendo y sobre las que no sabía muy bien qué pensar. A la vez, sentía la responsabilidad de reflexionar sobre el mundo en el que nos adentrábamos. Creo que ¡Nop! es una película que refleja la naturaleza espectacularmente desalentadora de los tiempos en los que vivimos. Tengo muchas ganas de que la gente la vea. Espero que les procure una gran evasión pero también cierta perspectiva para reflexionar sobre el devenir de la humanidad.

Esto me recuerda a una conversación que tuve con Adam McKay este año a propósito de Succession y No mires arriba. En tu cine, como en el de McKay, siempre está presente el humor. Pero a medida que la realidad se vuelve más loca vuestras películas se vuelven más realistas. Absolutamente. A mí se me acusa de recurrir mucho a la comedia. Pero yo la uso porque estoy intentando ser lo más realista posible. Y la verdad es que la vida es divertida. Es retorcida, oscura, hermosa, por supuesto. Pero también es divertida. Y hay muchas películas que ignoran esa faceta de la vida. Hay muchas películas en las que nunca ocurre nada divertido cuando la realidad es que es difícil que en media hora no te pase algo cómico. Lo que siempre intento es convertir una premisa absurda en algo realista. Y eso pasa por hacer que el espectador se ría.

¿Qué enseñanzas sobre la improvisación y tu época de Key & Peele has aplicado a tu carrera como cineasta? La mejor forma de describirlo es que estoy programado para satisfacer al público. Y a la vez, también estoy programado para retar al público. Pero tampoco me gusta dejar atrás a ningún espectador. Así que siempre intento buscar momentos que nos hagan reír y gritar como colectivo.

Jordan Peele junto a Daniel Kaluuya en el rodaje de '¡Nop!'
Jordan Peele junto a Daniel Kaluuya en el rodaje de '¡Nop!'
Cinemanía

¡Nop! también reflexiona sobre la obsesión de la sociedad con las imágenes. ¿Crees que es una obsesión reciente, alentada por Instagram y la tecnología, o que acompaña al ser humano desde siempre? La obsesión con la imagen, con el espectáculo, es algo inherente al ser humano. Construimos nuestra tecnología para permitirnos tomar esas imágenes de la forma más rápida, directa y desechable posible. Esos avances tecnológicos que se podrían haber hecho para cambiar el mundo los hemos visto volcados en las redes sociales y en internet y van tan deprisa que el mundo de hace cinco años es difícilmente reconocible. Esta película quiere hablar de todo eso.

Acabo de ver la tercera temporada de Atlanta y me parece que hay aspectos en común con tu obra, cómo ambas ficciones se sirven del género y el humor, e incluso de la construcción de metáforas, para hablar de la tensión racial en EE UU. ¿Crees que Donald Glover y tú habéis creado escuela? Creo que con Déjame salir di en la diana de una serie de reflexiones y preguntas que un grupo de artistas se estaban haciendo al mismo tiempo. Con Déjame salir yo estaba en el lugar preciso en el momento adecuado y con el proyecto correcto. Y Donald con Atlanta también. Nosotros conectamos antes de que se estrenase mi primera película porque yo quería usar Redbone, su canción como Childish Gambino. Me encanta que se me asocie a Donald Glover. Es un jodido genio. Sabemos que en algún momento vamos a hacer algo juntos y que va a ser grande.

¿Quieres recibir todos los viernes en tu correo las mejores recomendaciones de cine y series? Apúntate a nuestra Newsletter.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento