Warner Bros. y DC tenían un problema gigantesco con Flash. La película protagonizada por Ezra Miller iba a reordenar la continuidad de su multiverso dándole una aventura en solitario por fin al veloz superhéroe que debutara en Batman v Superman: El amanecer de la Justicia, además de presumir de la compañía de dos Batman: el de Ben Affleck y el de Michael Keaton, regresando tras las películas de Tim Burton. Podía ser el Spider-Man: No Way Home de DC, pero los problemas con la justicia de Miller amenazaban su mismo estreno.
Poco a poco la situación se encarriló. Miller mostró propósito de enmienda tras ser arrestado y recibir múltiples acusaciones de agresión, asegurando en un comunicado “haber sufrido complejos problemas de salud mental” y “haber empezado un tratamiento”. “Quiero pedir disculpas a todos los que he alarmado y molestado por mi comportamiento”, proseguía el intérprete de Animales fantásticos, en una estrategia de relaciones públicas que terminó de cuajar gracias a que, de repente, resultaba que Flash era una excelente película.
Así lo aseguran quienes lo han visto, incluyendo a los actuales presidentes de DC Studios (James Gunn y Peter Safran). Flash, dirigida por Andy Muschietti, tiene previsto ahora estrenarse este 16 de julio, aunque la inquietud por la conducta de su protagonista no termine de haberse paliado. De ahí que sorprendan unas recientes declaraciones de Michael Shannon. El actor retoma su papel del General Zod (asesinado supuestamente en El hombre de acero) para Flash, y en Vanity Fair ha recordado cómo fue su experiencia trabajando con Miller.
Al parecer fue de lo más agradable, y a Shannon le sorprendieron las acusaciones posteriores. “Pensé que Ezra era encantador, fue muy amable conmigo cuando estuve allí”, explica el actor de Puñales por la espalda. “Es difícil hablar de ello, pero siempre intento darle a la gente mucho espacio en este negocio, porque hay mucha gente con problemas. Y a algunas personas se les permite más privacidad que a otras”.
Shannon no puede evitar empatizar con Miller. “Cada vez que alguien es el centro de atención y se meten con él, siento pena por él. Aunque esté justificado, sigue siendo una situación horrible”. La narrativa mediática se ha terminado ajustando más o menos a la actitud de Shannon, con lo que Flash apunta a estrenarse sin más polémicas. Por ahora.
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