Harvey Weinstein es uno de los peces gordos de la industria hollywoodiense, el productor y distribuidor más temido de la Meca del cine. Hablamos del copropietario de la Weinstein Company, conocido como ‘Harvey Manostijeras’ por su propensión a meter mano en los montajes y que ha pasado a la historia por impulsar el éxito de Quentin Tarantino y Kevin Smith, además de por esas triquiñuelas promocionales que cambiaron para siempre el entramado financiero de los Oscar. Se trata, además, del hombre detrás de producciones como Pulp Fiction, Shakespeare in Love o El paciente inglés, entre muchas otras.
Ahora, una investigación llevada a cabo por The New York Times ha revelado que Weinstein ha abusado durante años de su poder para conseguir favores sexuales de secretarias, modelos y actrices a cambio de impulsar sus carreras. Así, durante 30 años, el productor habría sido denunciado por al menos ocho mujeres con las que llegó a acuerdos económicos.
Una de las actrices que padeció acoso sexual por parte de Weinstein fue Ashley Judd, que, como cuenta la publicación, hace dos décadas se reunió con el productor en el hotel Peninsula Beverly Hills para lo que pensaba que sería un desayuno de negocios. Sin embargo, Weinstein le dijo que subiera a su habitación, donde él la esperaba en albornoz. Allí, le preguntó si le podría dar un masaje o si ella podía mirarlo mientras se duchaba. "¿Cómo salgo de esta habitación lo más pronto posible sin molestar a Harvey Weinstein?”, recuerda la actriz que pensó en aquel momento.
No fue la única profesional de la industria a la que el productor citó en ese hotel con las mismas intenciones, tal y como recoge The New York Times. Asimismo, entre las víctimas de Weinstein están otras mujeres como Emily Nestor, asistente temporal del productor, o la también actriz Rose McGowan.
Han sido varias las estrellas de Hollywood que han opinado sobre el asusto en redes sociales, entre ellas, la propia McGowan:
Anyone who does business with __ is complicit. And deep down you know you are even dirtier. Cleanse yourselves. — rose mcgowan (@rosemcgowan) 5 de octubre de 2017Rose McGowan: "Cualquiera que haga negocios con __ es cómplice. Y en el fondo sabéis que tenéis las manos aún más sucias. Limpiaos".
Wealthy people buy silence with settlements.The confidentiality clause allows predators to hurt other people. For decades. https://t.co/3SAn2A2h24 — Judd Apatow (@JuddApatow) 5 de octubre de 2017Judd Apatow: "La gente rica compra el silencio con acuerdos. La cláusula de confidencialidad permite a los depredadores hacer daño a otras personas. Por décadas".
As always, I stand with the brave survivors of sexual assault and harassment. It's not your fault. I believe you. — Brie Larson (@brielarson) 5 de octubre de 2017Brie Larson: "Como siempre, apoyo a las valientes supervivientes de acoso y abuso sexual. No es vuestra culpa. Os creo".
The woman who chose to speak about their experience of harassment by Harvey Weinstein deserve our awe. It's not fun or easy. It's brave. — Lena Dunham (@lenadunham) 5 de octubre de 2017Lena Dunham: "Las mujeres que decidieron hablar sobre sus experiencias de acoso por parte de Harvey Weinstein se merecen nuestra admiración. No es divertido ni sencillo. Es valiente".
I expect the Hollywood elite will remain largely silent about Weinstein. Me, I give zero fucks about any repercussions for condemning him. — Scott Derrickson (@scottderrickson) 5 de octubre de 2017
Scott Derrickson: "Supongo que la élite de Hollywood se mantendrá en silencio sobre Weinstein. A mí me da igual la repercusión que pueda tener por condenarlo".
Weinstein ha asegurado a The Times que "soy consciente de que la manera en la que me he comportado con mis compañeras en el pasado ha causado mucho dolor, y pido disculpas. Aunque estoy intentado mejorar, sé que me queda un largo camino". El productor estaría trabajando con terapeutas y planeando tomarse un descanso para "tratar este problema de frente".
Deadline ha publicado un comunicado de la abogada de Weinstein, Lisa Bloom, asegurando que el productor niega las acusaciones: "Como defensora de los derechos de la mujer, he sido honesta con Harvey y me ha escuchado. Le he dicho que los tiempos han cambiado, que es 2017 y que tiene que evolucionar. Harvey ha sido muy sincero y receptivo".
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