10 papeles que las estrellas preferirían olvidar

Qué dura es la vida del actor principiante: uno tiene que aceptar papeles en material de baja estofa para pagar las facturas, esperando que suene la flauta y le recluten como secundario en un blockbuster. Claro que, cuando la flauta suena, puede ser casi peor. Ya instalado en la cumbre, uno vuelve la vista atrás... Y encuentra, al principio de todo, 'ese' título, que aceptó cuando su casero amenazaba con patear la puerta, y que le abochornará hasta que le den el Oscar honorífico.

Pero no creáis que este problema se da sólo en los currantes del plató: las grandes estrellas también tienen borrones en sus currículums. Ya sea por cosas del ego, bien por afán de contribuir a una buena causa, bien porque sencillamente le dio por ahí, un actor de primera fila puede cometer un error fatal, poniendo su rostro en un bodrio. CINEMANÍA repasa 10 errores fatales, capaces de hundir cualquier carrera, demostrando que nadie se salva de un patinazo. Y si en esta lista sólo encontráis nombres masculinos, tranquilos: a ellas también les llegará lo suyo.

1 .- Sylvester Stallone: The Party at Kitty and Stud's

La historia es conocida, pero no deja de ser sabrosa: un joven Sylvester Stallone en los comienzos de su carrera acepta intervenir en una película erótica de serie B. Años después, un guión sobre un boxeador maduro y corto de luces, llamado Rocky, convierte a 'Sly' en estrella internacional... Y los productores de su debut dramático deciden relanzar el filme, con escenas añadidas de sexo explícito, y con el nuevo título de El semental italiano. Modesto como siempre, Stallone quitó hierro al asunto señalando: "Cuando uno está sin dinero, hace cualquier cosa". Al pobre le pagaron 200 dólares por su intervención.

2 .- Johnny Depp: The Brave

Como decíamos, las estrellas también son susceptibles de figurar en un desastre bochornoso. Y, qué cosas, eso suele ocurrir previa sobredosis de ego: el caso de The Brave es buena prueba de ello. Porque a Johnny le dio por debutar como director y guionista con una fábula amerindia sobre el rodaje de un filme snuff, protagonizada por él mismo y todo un experto en roles alimenticios como Marlon Brando. El resultado podría haber sido engendrado por Jim Morrison y Dennis Hopper en plena indigestión de peyote, y Depp es el primero en reconocerlo: "Fue un grave error, pero al menos me dio la ocasión de trabajar con Brando", declaró recientemente.

3 .- Brad Pitt: La sombra del diablo

El mismo año que Johnny Depp se empantanaba con The Brave, el director Alan J. Pakula tomó una de las peores decisiones de su carrera: dirigir a un caballero soso como un pan sin sal (Harrison Ford) y a una estrella en ciernes que arrebataba corazones teen en todo el mundo, un tal Brad Pitt. El entonces novio de Jennifer Aniston había impulsado esta historia de policías y terroristas del IRA como un proyecto personal: cuando Pakula le recordó que él estaba allí para rodar, no para obedecerle, Pitt montó en cólera, calificando a La sombra del diablo como "La peor película-si es que se le puede llamar así- jamás rodada".

4 .- George Clooney: El pacificador

Contra lo que pudiera parecer, el monumento humano conocido como George Clooney guarda un buen recuerdo de Batman y Robin: "Sería muy fácil verla ahora y decir 'menuda mierda', pero esa película cambió mi carrera", reconoce. Lástima que no pueda decir lo mismo de este despropósito, el primer filme producido por Dreamworks, que emparejaba al -por entonces- guaperas de Urgencias con una Nicole Kidman libre -por entonces- del bótox y sus rigideces. La película fue un desastre en taquilla, y Clooney no quiere ni oír hablar de ella.

5 .-Gary Oldman: Air Force One

A veces, tener en el reparto a un actor que daría cualquier cosa por no estar allí tiene sus ventajas. Tan temperamental y tan británico él, Gary Oldman aceptó esta película de acción presidencial "sólo por el dinero", como reconoció más tarde, y su poca afinidad con el papel de terrorista ruso era tal que aprovechaba las pausas del rodaje para entretener al equipo con chistes e imitaciones. Oldman resultaba tan gracioso, dice la leyenda, que incluso Harrison Ford se reía con sus payasadas.

6 .- Robert Downey Jr.: Gothika

Antes de Iron Man, de Sherlock Holmes y de Tropic Thunder, Robert Downey Jr. era un actor con talento... Al que nadie quería contratar dadas sus múltiples adicciones y su carácter inestable. De modo que aceptó contribuir a este vehículo de lucimiento para una Halle Berry entonces en la cresta de la ola, machacado por los críticos y de mediocre taquilla. Downey sólo conserva un buen recuerdo del rodaje: haber conocido a la productora Susan Levin, su actual esposa y una de las responsables de su regreso triunfal al estrellato.

7 .- Robert De Niro: Showtime

Rescatar un solo despropósito en la carrera del actor de Little Italy es complicado: desde finales de los 80, De Niro nos obsequia con 'obras maestras' de la talla de El espantatiburones, Las aventuras de Rocky y Bullwinkle y Asesinato justo. ¿Por qué nos fijamos en Showtime como su proyecto más bochornoso? Pues porque en ella De Niro aceptó compartir encuadres con Eddie Murphy, un gafe como no hay dos, para una parodia de los realities policiales estilo Cops. ¿Resultado? Sendas nominaciones a dos Razzies como Peor Actor y -junto a Murphy- Peor Pareja Escénica.

8 .- Marlon Brando: El novato

Qué triste, pero qué rematadamente triste resultó el ocaso de Marlon Brando. No lo decimos sólo por el suicidio de su hija Cheyenne, o por su deterioro físico, sino por haber aceptado autoparodiarse a cambio de unos 'pocos' millones de dólares en títulos infames. Esta comedia mafiosa, coprotagonizada por un Matthew Broderick al que ya empezaban a pesar los años, no es el peor trabajo de sus años de decadencia, pero resultaba especialmente doloroso ver al genial actor recuperando en tono bufo su personaje de El padrino, sólo que esta vez sin necesidad de prótesis para parecer obeso. Según el crítico Gene Siskel, el propio Brando calificó a El novato de "bazofia" tras el rodaje.

9 .- John Travolta: Campo de batalla: La Tierra

"Primero la obligación y después la devoción", dice el proverbio. Lamentablemente, la recién recuperada estrella de Pulp Fiction no lo entendió así, dedicando todo el crédito y el prestigio recién obtenidos en adaptar una novela de L. Ron Hubbard, fundador de la Iglesia de la Cienciología. Si el profeta aconsejaba "funda una religión y te harás millonario", Travolta sólo entendió la primera parte del mensaje: la película fue un desastre que no gustó ni a Tom Cruise, se hundió en taquilla y ganó un total de nueve Razzies. Su máximo responsable pasó de hablar de ella con entusiasmo (antes del estreno) a eludirla educadamente como tema de conversación (después).

10 .- Shia LaBeouf: Indiana Jones y el Reino de la calavera de cristal

Por lo general, un actor reniega de un filme cuando este es un estropicio crítico, un fracaso taquillero monumental o ambas cosas. Aunque acogida tibiamente, la cuarta entrega de la saga Indiana Jones no fue ni lo uno ni lo otro, pero el pobre Shia LaBeouf se ganó un lugar en los titulares reconociendo lo que nadie se atrevía a imprimir: "Siento que traicionamos el legado de la serie", declaró el actor, reconociendo que Harrison Ford y él no se habían llevado bien durante el rodaje, y que el guión impulsado por George Lucas era más bien detestable. "Probablemente Steven Spielberg me llame la atención por esto, pero cuando fracasas, fracasas", resumió LaBeouf. Hace falta valor...