10 directores que son buenos actores

Seguimos pasando revista a los cineastas que se ponen frente a la cámara, esta vez recordándote que algunos de ellos dan la talla en eso de actuar (cuando quieren). Por CINEMANÍA
10 directores que son buenos actores
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10 directores que son buenos actores

Quentin Tarantino, Kevin Smith, Roman Polanski, John Waters... Todos son directores de cine, y ninguno de ellos es un actor superdotado, como te recordábamos en nuestro informe del viernes. Pero en CINEMANÍA nos gusta dar una de cal y otra de arena, así que a continuación te ofrecemos una lista de directores que sí dan el pego cuando se ponen frente a la cámara.

Pero, ojo: no estamos hablando de profesionales que compaginan la actuación con la dirección, sino de cineastas que gustan de asomarse de vez en cuando al otro lado del oficio. Nada de Charles Chaplin u Orson Welles aquí: todos nuestros personajes son amateurs, pero con talento.

1 .- John Huston

Hijo de Walter Huston, grandísimo actor que figuró en más de una de sus películas, el autor de El Halcón maltés tiene nada menos que 55 títulos como actor en su filmografía (datos de iMDB), la mayoría en pequeños papeles sin acreditar y como cameos en sus propios trabajos. Eso sí: durante los años 60 y 70, cuando las vacas flacas llamaron a su puerta, Huston no se cortó en aceptar cuanto papel se le puso a tiro, bien para ahorrarse unos dólares en el cásting de sus películas (Paseo por el amor y la muerte) bien por amor a lo descabellado (en La conquista del Planeta de los simios salía monísimo). Aunque recordamos con cariño su papel de Gandalf en una TV-movie de El retorno del Rey (1980), el papel de su vida fue el de Noah Cross, el perverso cacique del Chinatown de Polanski.

2 .- Martin Scorsese

"Vuelva a encender el taxímetro". Incluso Travis (Robert DeNiro), el Taxi Driver más peligroso de Nueva York, se achantaba al oír al genio de Little Italy divagando sobre el adulterio de su mujer ("¡Con un negro!") en uno de los cameos más inolvidables de la historia del cine. Aunque en la pantalla abulta poco, 'Marty' se las ha apañado para hacerse una estimable filmografía como actor, bien chupando cámara, bien interviniendo en trabajos de amigos como Akira Kurosawa o Bertrand Tavernier. Recientemente se le ha visto en Los Soprano (una descacharrante intervención as himself en el primer capítulo) y en Rockefeller Plaza.

3 .- Jaime Chávarri

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Al igual que Scorsese, uno de los directores más a contracorriente del cine español se ganó un merecido reconocimiento con un monólogo. Que se lo digan a Carmen Maura y Verónica Forqué, quienes aguantaban el maratoniano discurso del cineasta sobre su potencia viril en ¿Qué he hecho yo para merecer esto? de Pedro Almodóvar. Todoterreno donde los haya (ha dirigido incluso filmes porno, firmándolos con su propio nombre), el autor de El desencanto y Las cosas del querer ejerció también de madurito ligón en el videoclip Y sin embargo, de su amigo Joaquín Sabina.

4 .- Harold Ramis

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Aunque su carrera como director cuente con pequeñas joyas (Al diablo con el diablo) y Atrapado en el tiempo sea una obra maestra indiscutible, el recuerdo de este director y guionista estadounidense está asociado irremediablemente a una frase: "Colecciono esporas, mohos y hongos". Frente al descaro de Bill Murray y la ingenuidad de Dan Aykroyd, Ramis aportó el punto científico a Los cazafantasmas, película cuyo libreto ayudó a escribir. Su última intervención ha tenido lugar en Año uno, del viejo colega Ivan Reitman, en la que daba vida al mismísimo Adán.

5 .- Christopher Guest

El feliz esposo de Jamie Lee Curtis y rey de los falsos documentales se adentró en las tablas como comediante, y nunca ha dejado de actuar... Aunque casi siempre en un solo papel. Porque Guest, que se deja ver ocasionalmente en trabajos de amigos como Stephen Frears y en shows de televisión, lleva repitiendo una y otra vez desde 1984 su rol de Nigel Tufnel, guitarrista de los Spinal Tap y orgulloso propietario de un ampli cuyo potenciómetro llega al once, tanto frente a las cámaras como sobre los escenarios de festivales de música en todo el mundo.

6 .- Rob Reiner

Al igual que Christopher Guest, junto al que actuó en Spinal Tap (puedes verles juntos en el video de arriba), el director de Cuenta conmigo y La princesa prometida tiene una doble vida como comediante televisivo y actor ocasional. Le hemos visto en títulos como Postales desde el filo, en Balas sobre Broadway de Woody Allen y, más recientemente, en Rockefeller Plaza.

7 .- François Truffaut

Cuando uno es bajito (muy, muy bajito), tiene una cara de intelectual francés que se distingue a kilómetros y, para colmo, es uno de los mejores directores de cine de todos los tiempos, le quedan pocas oportunidades para triunfar como actor. Este pilar de la Nouvelle Vague lo sabía: por eso se adjudicaba papeles en sus propias películas cuando podía (El pequeño salvaje, La habitación verde), y por eso aceptó ejercer de ufólogo musical en Encuentros en la tercera fase, de su admirador Steven Spielberg, pese a opinar que el filme era "poco mejor que un cómic".

8 .- José Luis Borau

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De filmografía tan breve como imprevisible, este outsider de nuestro cine ha tenido momentos para brillar delante de la cámara, bien por cuenta propia (el odioso gobernador civil de su obra maestra, Furtivos) o ajena, como cuando encarnó a un capellán carcelario en Todos a la cárcel, del maestro Berlanga.

9 .- Spike Lee

El cineasta afroamericano anda últimamente de capa caída, con lo que es un buen momento para recordar que, además de ser un gran director, también se defiende actuando. Con su habitual humor corrosivo, Lee prefiere adjudicarse a sí mismo papeles de tipejos antipáticos y grotescos, como el mánager ludópata de Mo'Better Blues, el compañero de correrías juveniles de Denzel Washington en Malcolm X. Como honrosa excepción tenemos a Mookie, el pizzero enfrentado al racismo de Haz lo que debas.

10 .- Sydney Pollack

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Estamos en 1998. Harvey Keitel acaba de abandonar el rodaje de Eyes Wide Shut, harto de repetir toma tras toma. Está claro que Stanley Kubrick necesita a un actor solvente y con un ego controlable para dar la réplica a Tom Cruise, pero ¿a quién recurrir? Pues al director de Tootsie y Memorias de África, cuya carrera dramática ha transcurrido sobre todo en TV. Vistos los últimos trabajos de Pollack tras la cámara (Sabrina y sus amores, Caprichos del destino) quizá debería haber dedicado sus últimos años de vida –murió en 2008– a la interpretación.

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