Crítica de 'Última noche en el Soho'

a estas alturas, el espectador interesado en las quisicosas de la crítica internacional estará al tanto del baño que muchos expertos anglosajones están propinándole a Última noche en el Soho. Sobre el nuevo trabajo de Edgar Wright llueven reproches que, o bien le acusan de ser pura forma y nada de fondo, o bien le reprochan no llegar lo bastante lejos en sus políticas sociales y de género (cuando no arremeten, desde el rincón opuesto, al grito de “planchabragas”).

Pues bien: ninguno de dichos ataques va a encontrar su eco en esta crítica, porque quien suscribe ha vuelto a caer rendido ante el director inglés. El cual demuestra (una vez más), no solo que se halla entre los pocos cineastas capaces de abordar el cine popular con la pasión que este merece, sino también que posee el don de apoyarse sin titubear en sus raíces, como el cine británico de los 60 y los 70, sin por ello quedar como un nacionalista acrítico, un nostálgico o un rancio.

Viniendo de quien viene, debería ser ocioso decir que Última noche… resulta intachable en su apartado formal: mientras que en Baby Driver vimos al director dando rienda suelta a su pasión por el ritmo, aquí le vemos ofreciendo un ejercicio de atmósfera, compuesto mediante neones y espejos sobre planos de terror, y no solo de terror, sin perder por ello marcas de estilo como los guiños pop o el amor por la música. 

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Si bien a colación de la película se han repetido hasta la saciedad los nombres de Argento, Bava y Nicolas Roeg (algo de culpa tiene Wright en esto último, aunque ahora se queje), también es verdad que las vidas paralelas de Thomasin McKenzie y Anya Taylor-Joy (ambas formidables en dos papeles aparentemente opuestos) serían muy distintas si en ellas no terciaran influencias menos evidentes, como cierta escuela de thriller psicológico made in UK (Repulsión, sí, pero también Luz que agoniza), los momentos más noir de la Ealing o el Free Cinema y sus derivados, como la Darling de John Schlesinger. 

Ojo, que no lo decimos nosotros: lo declara el director, poniendo los pósters de rigor en la marquesina de un cine, y también recurriendo a rostros de aquella época en su reparto. Tenemos a Terence Stamp (incólume su capacidad para el mal rollo), a las encantadoras Rita Tushingham y Margaret Nolan y, sobre todo, a una tremenda Diana Rigg cuyo papel póstumo es la verdadera arma secreta del filme. Honor a ella.

Así pues, Última noche… es coherente al construir su mirada al pasado mediante retales de un cine que ya no se hace. Pero su mayor virtud es ofrecernos esa mirada desde un ángulo nada complaciente hacia ese pasado, y a ese cine: a poco que uno se fije (y esta película, como todas las de su director, es una que se presta muchísimo a las revisiones) verá cómo el panorama de sordidez y misoginia que da forma a una de sus tramas no ha desaparecido, sino que solo se ha transformado, en aquella que le sirve de reflejo. 

Cinemanía

Y ahí también media la huella del autor, porque, aunque la película pierda algo de fuelle en su tercer acto, Wright tira una vez más de su mirada agridulce sobre el mundo para reír el último afirmando que, si bien la esencia del sistema no cambia, las personas sí podemos tomar nota de los errores del ayer para transformar nuestro presente en un lugar un poquito menos horrible. Puede que esa esperanza sea un síntoma de ingenuidad, pero ojalá tenga razón.

FICHA TÉCNICA

Última noche en el Soho

• Director:

  Edgar Wright

• Género:

  Thriller

• País:

  Reino Unido

• Sinopsis:

  La joven Eloise (Thomasin McKenzie) se muda de su pequeña casa en la campiña inglesa para estudiar en Londres, que no guarda apenas semejanza con la sesentera e idealizada ciudad que tenía en su cabeza. No obstante, encontrará en la historia de la joven Sandie (Anya Taylor-Joy) algo nuevo con lo que obsesionarse.

• Guion: Edgar Wright

• Duración: 118 min.

• Reparto: Thomasin McKenzie, Anya Taylor-Joy, Matt Smith, Terence Stamp, Diana Rigg

• Veredicto: La cinta más estilosa y más emocional de Edgar Wright. 

• Distribuidora: Universal

• Estreno: 19/11/2021