OPINIÓN

Miren donde quieran

Meryl Streep en 'No mires arriba'
Meryl Streep en 'No mires arriba'
Cinemanía
Meryl Streep en 'No mires arriba'

¿Recuerdan aquella película titulada No mires arriba? Viendo la velocidad de los hypes de hoy en día, temo que ya sea un fugaz meteorito del pasado cuando se publican estas líneas. Me sedujo su sátira limpia y cristalina, me atrajo su montaje trufado de vida real, aprecié sus efectos especiales, me divirtieron sus montajes de televisión o redes sociales, me conmovió la última decisión de sus protagonistas y me sorprendió esa broma final. 

Fui feliz viéndola, y también triste, que es una buena mezcla de sensaciones. O como el doctor Mindy describe el cometa: “Es horrible y precioso”. Formé parte de la masa de fans entregados, pero al mismo tiempo que nuestro entusiasmo se asentaba, una ola de desidia, menosprecio o decepción se levantaba contra No mires arriba. Así que tomé la decisión que haría cualquier persona cabal: volví a verla.

Caí de nuevo en sus redes, quizás con más aplomo gracias al relax que te concede saber lo que va a pasar. Podrían limarse algunas asperezas (la lentitud del inicio, Meryl Streep y Jonah Hill abusando de la caricatura, la insoportable canción de Ariana Grande), pero ahí está el impecable retrato de los medios generalistas (enorme Cate Blanchett), el postureo de los artistas, la vacuidad new age del modelo de negocio basado en apps, la hilaridad de los pequeños detalles (el militar que cobra las botellas de agua en la Casa Blanca, el pedo de Sting, las campañas publicitarias gubernamentales sin contenido) y esa serena entereza de la última cena (“lo gracioso es que en realidad lo teníamos todo”) que balancea el conjunto a favor.

Así hemos sentido la película unos cuantos espectadores. Y a otros tantos no les ha llegado, les ha resultado indiferente o, simplemente, decepcionante. No por sabido, trillado y experimentado resulta menos fascinante que una película provoque reacciones tan distintas. Nos encanta que estos fenomenales desencuentros nos devoren como un bronteroc.

Pepe Colubi

Parte de la comuna ILUSTRES IGNORANTES y ha escrito un par de novelas esperando un inmerecido golpe de suerte que le aleje del esfuerzo. Espectador de todo.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento