Batman Arkham City: Más y mejor

En agosto de 2009 Warner Interactive y los estudios Rocksteady lanzaron al mercado uno de los mejores juegos de aquel año, y hasta el día de hoy, el mejor juego que se ha creado sobre un personaje de cómic. Dos años después, y como debe ser con todo título como Dios manda, nos traen su secuela. Y amigos, qué secuela.

Batman Arhkam City nos traslada de nuevo a la ciudad más peligrosa del universo de DC Cómics unos meses después de los acontecimientos que vivimos en Batman. El crimen sigue devorando las entrañas de la ciudad, ahora de manera literal, ya que el casco viejo de la ciudad se ha convertido en una gran prisión donde toda la basura no reciclable se agrupa en bandas bajo el mando de lo mayores criminales, y archienemigos del hombre murciélago.

La gran idea de juntar ese polvorín en el corazón mismo de la ciudad es de Hugo Strange, uno villano de Batman que tal vez sea un desconocido para la mayoría jugadores, pero que en las páginas de los cómics se las ha hecho pasar canutas a Batman más de una vez. Este afamado psiquiatra y criminólogo está obsesionado con la figura de Batman y se las ha apañado para que las autoridades le permitan montar un sanatorio mental (o parque temático del crimen) para delincuentes en la ciudad. Bruce Wayne (Batman sin el pijama), como representante de los ciudadanos, decide montar una campaña en contra de Strange y su institución, pero por cosas de la vida (y de los videojuegos), acaba dentro de la prisión, sin poder salir. Claro, que a lo mejor no quiere salir, porque amigos, en cuanto se pone la máscara, Batman tiene mucha tarea por delante.

Imagínate un GTA (sin coches, eso sí) de Batman, con toda la potencia que la actual generación de consolas puede ofrecer, y empezarás a hacerte una idea de lo grande que es este juego. Enorme. Tres distritos enteros de la ciudad, una noche interminable de invierno, miles de pandilleros violentos y los peores súpercriminales que tengan cuentas que ajusta con Batman. Todo junto. Desde que empieza la partida te darás cuenta, primero de la enormidad del mapeado, de lo grande que es todo, tanto en extensión como en altura. Segundo, de la atención al detalle que Roscksteady ha puesto en todos y cada uno de los elementos del juego. La ciudad es sucia, vieja, húmeda y está salpicada de sangre y luces de neón. Un sito donde Frank Miller sería feliz, y e mejor escenario para meternos bajo la capucha del murciélago y jugar a ser Batman como siempre has soñado.

Batman es un tipo contundente y lleno de sorpresas. Podrá moverse a la carrera o en sigilo por los callejones. Explorar entornos, túneles de metro y lugares emblemáticos de los cómics. Podrá trepar por las fachadas de los edificios, utilizar su Batcuerda para elevarse o balancearse, o planear. Y a la hora de repartir cera, no hay nadie como el murciélago. Ya sea con su contundente cuerpo a cuerpo (las mecánicas de combate son dinámicas y espectaculares, mejorando incluso las del primer juego), usando distintos gadgets o nuestras técnicas silenciosas en plan ninja (como le gustarían a Snake), Batman es un tipo duro y letal. Y más le vale, porque las va a pasar puñetas.

El caballero oscuro no sólo va a tener que lidiar con todos los delincuentes y desequilibrados que pululan por las calles, también se verá las caras con su villanos preferidos. Dese los principales y famosos Joker (y Harley Quinn), Dos Caras o El Pingüino, a otros de nuevo cuño como Víctor Zsasz o segundones increíbles como Solomon Grundy (y qué gratificante es hacerle morder el polvo a Solomon Grundy) o Máscara Negra. El nivel de maldad por píxel cuadrado de éste juego es impresionante. Nos encanta.

Y esté más tiene unas curvas de escándalo, un ceñido traje negro, muy mala actitud y le gusta ronronear. Catwoman también está atrapada dentro de Arkham City y aunque no tiene muy claro si echarle un cable a su querido Batman o no, será un personaje con sus propias misiones y que podrás manejar dentro del juego con total libertad.

Técnicamente el juego es impresionante. Solamente trepar a un punto alto de la ciudad y observar las calles o el horizonte es toda una experiencia. Los gráficos son potentes, las animaciones fluidas, el sonido contundente, la banda sonora épicas… Y sin apenas tiempos de carga o una larga instalación al comenzar a jugar. Una maravilla técnica, que sí, tiene algún bug (algunas veces, al pelear, la capa de Batman hace algún movimiento extraño, o se da algún cruce de polígonos) pero son prácticamente inexistente. Que gustito da cuando los juegos llegan a las consolas bien pulidos, sin necesidad de parches ni actualizaciones.

Un último elemento técnico a destacar es la posibilidad de poder jugar en 3D. Ya sea con gafas bicolores, o si tienes una pantalla 3D, es una experiencia que multiplica por mil las gratificaciones de este juego, que si a alguien se le queda corto (y mira que es difícil, pero bueno, hay gente así en el mundo…) se completa con un par de modos extras en los que podrás demostrar que res digno de llevar la capa de Batman y enfrentarte a retos realmente complicados.

Batman Arkham City no es sólo el mejor juego sobre un personaje de cómic jamás creado, es también uno de los mejores juegos de este año, y en BAZINGA nos tiene muy, muy, muy enganchados. Un título imprescindible de 2011.

Esto es BAZINGA, donde un murciélago aleteando en la noche es siempre un presagio.

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