Así actúa tu cerebro cuando está viendo porno

  • La actividad cerebral es similar a la que se registra en adictos a las drogas.
  • Investigadores han encontrado una relación entre el tamaño y el visionado de porno: los espectadores frecuentes tienen menos materia gris que el resto.
Ilustración de la actividad cerebral, en una imagen de archivo.
Ilustración de la actividad cerebral, en una imagen de archivo.
GTRES
Ilustración de la actividad cerebral, en una imagen de archivo.

¿Cómo influye en el cerebro el visionado frecuente de porno? La actividad cerebral varía y es similar a la adicción a las drogas y al alcohol, según informa el medio Medical Daily, que recoge diferentes estudios y declaraciones de varios expertos.

Uno de ellos, Joe Schrank, especialista en adicciones, asegura que tanto la práctica del sexo como ver porno libera dopamina en la parte del cerebro responsable de las emociones y del aprendizaje. De hecho, se convierte en el neurotransmisor más activo. "El principal cambio es la inundación de dopamina". Y claro, cuando esta se libera "hay una sensación de placer y el cerebro envía el mensaje para repetir el comportamiento". A más dopamina liberada, más ganas de repetir la acción. Es el principio del fin. Además, también se libera oxitocina y vasopresina. Estas hormonas ayudan a la persona a recordar recuerdos a largo plazo.

Un estudio de la Universidad de Cambridge de 2014, además, encontró tres regiones del cerebro que eran más activas en personas con comportamiento sexual compulsivo, incluyendo la zona ventral, la corteza anterior dorsal y la amígdala. Lo descubrieron cuando los voluntarios se exponían a vídeos de contenido sexual. Como curiosidad, esas mismas zonas también se activan en toxicómanos cuando se les muestran sus fármacos. La edad también parecía afectar a la actividad cerebral durante el visionado. Cuanto más joven era el paciente, mayor era el nivel de actividad en su estriado ventral y aún mayor en los individuos con conducta sexual compulsiva.

El tamaño también varía. Investigadores alemanes descubrieron que el volumen de la materia gris era menor entre los espectadores frecuentes de pornografía y que tenían una menor actividad en otra área. Estos cambios son similares a los que sufren los adictos a la cocaína, que desarrollan anomalías en áreas responsables del aprendizaje, la memoria, el placer y la recompensa.

Por ello, Joe Schrank aconseja que, "como con cualquier cosa en la vida, el equilibrio es la clave". "Los cerebros necesitan diversidad". Ya lo sabe, vea porno... con moderación. 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento