Formigal, al Pirineo aragonés se viene a disfrutar

  • Es la mayor infraestructura de nieve de Aragón, con 137 km y 101 pistas.
  • Sus posibilidades son muchas: cambiar los esquís por flotadores, un circuito para bajar en trineos unidos o un descenso nocturno en trineo de madera.
  • Ofrece multitud de actividades para los niños, desde los 4 meses.
Estación invernal de Formigal, en Huesca.
Estación invernal de Formigal, en Huesca.
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Estación invernal de Formigal, en Huesca.

La estación de esquí de Formigal, la más grande del Pirineo aragonés, apuesta por una oferta lúdica y deportiva integral. Además de la belleza natural del Valle del Tena, es posible desde un masaje con gemas o vinoterapia hasta deslizarse en trineo en plena noche.

La mayor infraestructura de nieve de Aragón, la de Formigal, tiene de 137 kilómetros y 101 pistas. No falta nada, desde un completo snowpark a las pistas para realizar snowbike o las excursiones con raquetas de nieve. Además, es posible bautizarse, en compañía de la familia, en el trineo de perros en la zona del Valle de Izas-Sarrios.

Sus posibilidades son muchas. En Portalet Park se cambian los esquís por flotadores que se deslizan por pistas con peraltes. El Snake Gliss es un circuito para bajar en trineos que van unidos, y también se puede optar por un paseo en trineo de perros. Causa furor el Tobogganing, un descenso nocturno de 2,5 kilómetros por una pista perfectamente iluminada a lomos de un trineo de madera.

Antes del descenso cenamos y después pasamos por Marchica, un centro de animación nocturna con fiestas temáticas y la actuación de reconocidos disc jockeys.

La estación ofrece multitud de actividades para los niños de todas las edades (desde los 4 meses). Fiestas, talleres, ludotecas, clases de baile y clases de esquí adaptadas a cada edad. Incluso hay un iglú y un poblado indio en el bosque.

Formigal tiene lo que pocas estaciones: un balneario urbano en el corazón de los Pirineos. Es el centro Spa Aguas Limpias que permite recuperarse de la dura jornada de esquí. El balneario permite muchas otras alternativas, desde la fuente de hielo hasta tratamientos reconfortantes con gemas o vinoterapia.

Y si nos cansamos de esquiar está el arte románico. El Valle de Tena, un entorno de gran belleza, esconde algunos tesoros de la arquitectura románica. Se pueden realizar varias rutas por la comarca del Alto Gállego.

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!

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