Videojuegos

La falsa historia sobre un piloto de la Segunda Guerra Mundial que dio pie a la creación de Sonic, el erizo de Sega

Pantalla de inicio del videojuego 'Sonic The Hedgehog' de Mega Drive.
Sega

Dos de los creadores de Sonic, Naoto Oshima y Hirokazu Yasuhara, han contado en la Game Developers Conference, un importante encuentro anual de desarrolladores de videojuegos, infinidad de detalles sobre el proceso de creación del famoso erizo azul mascota de Sega.

Oshima, que fue el responsable del diseño del personaje, ha recordado cómo en 1990 Sega buscaba un personaje potente que representase a la compañía y con el que poder competir contra Nintendo y el carismático Super Mario.

Él y el resto del equipo tuvieron desde el principio la idea del erizo, un personaje con muchas posibilidades en un videojuego ya que pondía enrollarse y, en forma de bola, rodar y dañar a los enemigos con sus púas. Pero tenían otras posibilidades en mente, entre ellas un armadillo, un puercoespín, un perro y un viejo con bigote, que acabaría convirtiéndose en Eggman / Robotnik.

Mientras se discutía internamente sobre qué opción era mejor, Oshima realizó un viaje a Nueva York, dibujó los tres conceptos que más apoyos tenían (el erizo, el hombre con bigote y el perro) y se planto con los bocetos en Central Park, en Manhattan, donde realizó un sondeo con la gente que pasaba, a la que preguntaba qué personaje le gustaba más.

El erizo era el que más gustaba con diferencia, seguido del hombre con bigote y del perro en tercer lugar. Reflexionando sobre ello, Oshima llegó a la conclusión de que probablemente se debía al hecho de que el erizo trascendía conceptos como la raza o el género y podía representar a cualquiera. De inmediato, hizo llegar los resultados a la compañía.

Los primeros diseños eran muy sencillos. Se buscaba un personaje que los niños pudieran dibujar y que además fuera muy fácilmente reconocible, algo así como Mickey Mouse o Doraemon. Sin embargo, el verdadero reto era convencer a Sega de que ese era el personaje que podía representar a la empresa.

Para conseguirlo, primero se decidió que fuera de color azul para que encajase con el logo de la compañía. Después se puso énfasis en tres conceptos, que fuera genial, desafiante y, lo más curioso, que representara una historia.

Es en este último punto donde los creadores han sorprendido a los asistentes de la GDC con un relato muy poco conocido. Aunque Sega es una compañía japonesa, sus orígenes realmente son americanos, ya que fue fundada por estadounidenses en Hawaii, y puesto que además se buscaba que Sonic tuviese una repercusión internacional, Oshima decidió darle un trasfondo occidental al personaje.

Con esto en mente, el diseñador acudió a sus superiores con una increíble historia inventada. Dijo haber descubierto, en unos documentos antiguos sobre aviones, la historia de un piloto de la Segunda Guerra Mundial que en 1940 se ganó el apodo de "Erizo" porque le encantaba volar a altísimas velocidades, lo que hacía que su pelo se pusiera de punta. A raíz de su sobrenombre, el piloto incluyó el dibujo de un erizo en su avión y también lo bordó en su chaqueta de cuero.

Años después, el hombre se casó con una mujer que escribía e ilustraba libros infantiles. Según el relato inventado de Oshima, inspirada por su marido, la mujer escribió un cuento sobre un erizo muy veloz. Ese relato infantil se vendió a los jefes de Sega como la supuesta inspiración del videojuego Sonic the Hedgehog para la consola Mega Drive.

Todos estos elementos, unidos a otros factores como la idea del ecologismo y la preocupación por el medio ambiente (que era un tema de primera línea a principios de los noventa) permitieron el nacimiento de un personaje que consiguió lo que se pretendía, que representase a la compañía como mascota, que lograse rivalizar con la competencia y que se convirtiese en un icono de reconocimiento mundial.