Valladolid

Un centenar de trabajadores de Hibramer se concentra a las puertas de la fábrica en Valladolid

Concentración de trabajadores a las puertas de Hibramer en Valladolid.
EUROPA PRESS

Alrededor de un centenar de trabajadores se concentró este miércoles a las puertas de la fábrica de piensos de Hibramer en Valladolid para reclamar que la empresa, perteneciente al Grupo Nueva Rumasa, entre en concurso de acreedores y evitar así la pérdida de empleo o abocar al cierre a la misma.

Los trabajadores se concentraron a las puertas de la fábrica, ubicada en el polígono industrial de San Cristóbal con una pancarta en la que se podía leer "Por el empleo estable y de futuro" y carteles con mensajes como "huevos frescos, los nuestros, no los de Ruiz-Mateos" o "queremos mantener nuestro empleo" y coreaban gritos como "pío, pío, pío, pío lo que es mío", entre otros.

A las puertas de la fábrica, el secretario de la Federación Agroalimentaria de UGT, Eleuterio Sancho, explicó que en Hibramer no se ha hecho "absolutamente nada" y lo que se pretende es que "de verdad" la empresa —que cuenta con unos 110 trabajadores entre gallineros, fábrica y ovoproductos— entre en el concurso de acreedores porque considera que sería "la única manera de arreglar este asunto".

En este sentido, concretó que lo que se pretende es que se devuelva a la actividad normal a la empresa, lo que, reiteró, "pasa por el concurso", algo que puede producirse el jueves o el viernes.

Sin actividad

Así, indicó que la situación en piensos es de "absoluto paro" y llevan casi sin actividad "bastante tiempo", mientras que en los gallineros se trabaja al 50 por ciento. Sin embargo, explicó que si se mantiene esa actividad y se entra en concurso se podrá salvar el empleo, que es lo que aseguró que les "mueve" a seguir adelante y apoyar cualquier medida que se haga tanto desde la empresa como desde el sindicato o la administración.

En cuanto a posibles ofertas por las empresas del Grupo Nueva Rumasa en Castilla y León, afirmó no tener conocimiento de que haya alguna, pero aclaró que no sería algo malo porque todas estas empresas "son viables" y cree que tienen mercado e incluso puede recuperar algunos de los clientes perdidos.

Sancho, en declaraciones recogidas por Europa Press, indicó que la pérdida de valor de las empresas del Grupo se produce "de la noche a la mañana" y cree que el problema es la "marca" Ruiz-Mateos a pesar de que sean viables, ya que hasta 15 días había normalidad en las mismas.

Por su parte, Miguel Ángel Montalvillo, miembro del Comité de Empresa y representante de UGT, afirmó que los trabajadores están "bastante nerviosos" y preocupados por su futuro, ya que hay tanto familias que dependen del único sueldo de esta empresa —la mayoría de entorno a 1.000 euros— a gente joven que tiene hipoteca, por lo que cree que seguirán las movilizaciones hasta llegar a una solución clara.