Pantelleria, austeridad chic

  • Giorgio Armani y Gerard Depardieu son visitantes habituales.
  • La mejor opción es alojarse en un 'dammuso'.
  • La actividad volcánica ha creado paisajes heterogéneos.
Aunque no hay playas convencionales, sí proliferan las calas.
Aunque no hay playas convencionales, sí proliferan las calas.
Patricia González Salas
Aunque no hay playas convencionales, sí proliferan las calas.

Pantelleria es uno de los destinos más desconocidos y distinguidos de todo el Mediterráneo. El encanto austero y la tranquilidad que se respira en esta isla italiana ubicada entre Sicilia y Túnez la han convertido en refugio de celebridades como el diseñador italiano Giorgio Armani o los actores franceses Gérard Depardieu y Carole Bouquet.

La manera más cómoda de viajar de España a Pantelleria es utilizar alguna de las líneas low cost que unen la Península con Sicilia y a continuación tomar otro vuelo desde el aeropuerto de Trapani en dirección a la propia isla. También existe la opción de llegar en ferry, pues hay líneas regulares que parten de las localidades de Trapani y Mazara del Vallo.

<p>Pantelleria</p>Antes de llegar a Pantelleria, es recomendable reservar un dammuso, casa de origen árabe construida habitualmente en piedra de lava de color gris oscuro cuyo techo dispone de grandes terrazas orientadas al suroeste. Estas humildes viviendas de campesinos, muchas reconvertidas en alojamientos para turistas, son frescas en verano y cálidas en invierno gracias a sus gruesos muros, que pueden alcanzar el metro y medio de espesor. La tranquilidad y la intimidad están garantizadas.

Una vez alojados cómodamente, Pantelleria ofrece un gran número de atractivos al visitante. Para empezar, sus extraordinarios y variados paisajes. La actividad volcánica ha creado una morfología compleja, que va desde los acantilados que se encuentran fundamentalmente en el noreste y el sureste, hasta las colinas que se hayan en el noroeste o la conocida como Montaña Alta, que domina el centro de la isla con sus 836 metros de altitud y ofrece unas vistas impagables de la costa tunecina.

El mar es especialmente transparente y, aunque no hay playas convencionales, sí proliferan las calas. Otra opción para quien quiera darse un baño, es una pequeña piscina natural situada junto a la costa que se conoce por el nombre de Laghetto delle Ondine. También existen lugares donde darse un chapuzón en agua caliente durante todo el año gracias al volcán. Si tiene la oportunidad, no dude en alquilar una embarcación para recorrer la costa. No lo lamentará.

Pantelleria también es conocida por sus exquisitos productos gastronómicos. En el puerto se pueden adquirir vinos, alcaparras en sal, conservas de verdura o aceite de oliva. Precisamente, un viejo conocido de los españoles, el entrador de fútbol italiano Fabio Capello, acaba de meterse en el negocio del aceite de oliva en Pantelleria. En la misma zona de la isla existen coquetos restaurantes que ofrecen estupendos pescados, pastas y carnes.

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