Esculpir los ambientes
Cocina: Es uno de los espacios que más se utilizan en el hogar, por lo que es imprescindible contar con una buena iluminación. Es recomendable iluminar el techo con fluorescentes y complementar con algunas lámparas bajo los armarios.
Baño: Es aconsejable utilizar una luz general y otras dirigibles hacia la zona de maquillaje o afeitado.
Salón: En la zona de lectura es conveniente colocar lámparas auxiliares o flexos que se puedan orientar. Para ver la televisión o conversar se pueden utilizar luces indirectas como lámparas de pie o de sobremesa, que además ayudarán a conseguir un ambiente más acogedor y cálido.
Comedor: Para la zona de la mesa tenemos que escoger una luz intensa, pero cuidando de que no deslumbre.
Dormitorio: La luz debe ser acogedora, puede tratarse de lámparas de techo o bien de apliques que dirigen la luz hacia arriba o hacia las paredes. No obstante, si te gusta leer en la cama coloca una lámpara potente en la mesilla de noche que te permita ver bien.