Peralta niega que comer en un chiringuito fuera una "provocación" y pide a hosteleros que no sigan estrategias políticas

Peralta se expresó de esta manera en relación a las declaraciones del conseller de Gobernación, Serafín Castellano, que calificó de "provocadora y chulesca" la actitud de Peralta por comer en un restaurante de la playa de Pinedo tras concentración de los hosteleros para reclamar una "solución definitiva" al "conflicto" de los chiringuitos. De provocación "nada", subrayó.

En primer lugar, Peralta quiso dejar claro que el trato recibido en el restaurante fue "absolutamente normal" y con un servicio "magnífico" y "quien vea en eso provocación, solo revela una administración, como es la Administración autonómica, que no tiene otro interés que el conflicto y el enfrentamiento".

Peralta indicó que la Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana "por el contrario", lo que busca en relación a los chiringuitos es "poner de manifiesto su normalidad, su magnífico servicio, la voluntad que tenemos de colaborar con ellos y de seguir trabajando con ellos y nuestra disposición a ser flexible en la búsqueda de soluciones".

"Esperamos recibir por parte de ellos el mismo trato y no dejarse embarcar en aventuras políticas y en estrategias políticas que sólo tienen un claro carácter partidista", remarcó.