Audi e-tron: Pura energía

Los coches con funcionamiento eléctrico siguen representando a día de hoy un volumen insignificante en el mercado por el sencillo hecho de que todavía no pueden adquirirse. Sólo en Alemania, donde ya hay alguno circulando, la cifra es insignificante: apenas 1.500 coches circulan sin consumir una gota de combustible y sin emitir gases nocivos a la atmósfera. Pero otra cosa totalmente diferente es el interés del público por descubrirlos, probarlo y ¿por qué no? adquirir uno en un plazo relativamente corto.

Audi no quiere quedarse atrás y, al margen de la tecnología híbrida (que aplicará en el Q5 próximamente), han querido desmarcarse con un deportivo exclusivamente eléctrico. El nuevo e-Tron es algo más pequeño que un R8 (4,26/1,90/1,23 metros) aunque conserva prácticamente las mismas líneas de diseño. Por dentro, sin embargo, todo cambia.

Funcionamiento

Propulsado por cuatro motores eléctricos situados en cada rueda, el e-Tronic es capaz de juntar 313 cv de potencia en el momento de máximo esfuerzo. La cabina donde van los dos ocupantes está ligeramente posicionada hacia delante, debido a que el enorme módulo de baterías (que pesa 450 kilos) se sitúa como en los modelos con motor en posición central trasera. Así, el equilibrio de pesos se ajusta llegando a un reparto del 42:58.

Las cuatro unidades que ponen en movimiento a este coche van montadas junto a cada rueda. La diferencia entre los motores traseros y los delanteros es que los primeros tienen sistema de refrigeración propia, algo que los segundos no necesitan por recibir ventilación directamente desde el frontal.

Para circular con él basta con recargar su bloque de baterías en 6-8 horas. Se puede hacer en el enchufe de casa, donde debemos esperar este tiempo, o en una toma de alta tensión, donde el tiempo quedará reducido a 2 horas y media. Aunque Audi también incorpora lógicamente sistemas de recuperación de la energía en la frenada, se han inventado la forma de calentar el habitáculo sin utilizar calefacciones eléctricas auxiliares (lo que en otros modelos eléctricos compromete seriamente la autonomía). Funciona igual que un acumulador o una “bomba de calor” como las que utilizamos en casa: la bomba reúne la energía durante el proceso de carga y la utiliza para refrigerar/calentar durante la marcha del vehículo. De igual forma existe un climatizador para la mecánica que puede precalentar o enfriar los motores eléctricos durante el proceso de carga.

Prestaciones

En un caso de necesidad máxima, el e-Tron puede utilizar sus cuatro motores en la máxima potencia y acelerar sus 1.600 kilos hasta los cien km/h en 4,8 segundos. Sus datos de recuperación (los que asegura Audi en su comunicado oficial) aseguran que puede pasar de 60 a 120 km/h en 4,1 segundos. Esto quiere decir que siendo un modelo totalmente eléctrico puede acelerar prácticamente igual que el R8 menos potente, es decir, el 4.2 FSI de 420 cv que tarda 4,6. Lo que no podrá hacer, sin embargo, es alcanzar su velocidad máxima ya que el trabajo de los motores comprometería la autonomía de forma drástica. El e-Tron está limitado a 200 km/h y según las mediciones que ha hecho Audi tiene una autonomía en ciclo mixto de 248 kilómetros.

Comunicación Car-to-X

Audi también está adaptándose al sistema de comunicación global entre los coches y el mundo que se pretende poner en marcha en un futuro. En países como Estados Unidos, Japón y algunos europeos ya existe un protocolo entre fabricantes para desarrollar tecnologías sobre un único estándar de hardware y software. La aportación de Audi se llama Car-to-X, un sistema basado en esas normas que podrá entre otras cosas, avisar a otros coches si hemos quedado cruzados en la calzada o indicarnos la velocidad adecuada para evitar el mayor número de semáforos posibles.