Más de 3.500 personas se apuntan al décimo festival Deleste
Los más de 20 conciertos y actividades paralelas han ocupado lugares de referencia como los Jardines de Viveros, donde se han celebrado la mayoría de conciertos, la Fundació Per Amor al Art - Bombas Gens y el Museo de Bellas Artes de València, que han acogido una 'performance' de Laia Estruch y los Diálogos Deleste respectivamente, o el propio Almudín que albergó el concierto de clausura con una actuación de carácter íntimo con Valeria Castro.
Con estos ingredientes, el festival ha celebrado la efeméride manteniéndose fiel a su esencia de traer artistas que no suelen aparecer en los carteles de otros eventos, apostando por un proyecto de ocio cultural sostenible y de calidad, "alejado de los macro eventos masificados", y atendiendo a las necesidades de un público deseoso de disfrutar de experiencias singulares de manera sosegada, sin solapamiento de horarios, resaltan los organizadores.
Viveros fue el epicentro de la programación musical entre el viernes 27 y el domingo 29. La primera jornada se cerró con la actuación de la vocalista irlandesa Imelda May, junto a las también irlandesas Pillow Queens y las propuestas de Rufus T. Firefly y Júlia.
El sábado se produjo el reencuentro del público valenciano con The Sisters of Mercy, formación de culto en el panorama gótico y siniestro de la década de los 80. Otra actuación internacional la protagonizaron los belgas Balthazar con una buena dosis de pop bailable. Los Bengala, Joana Serrat y Novembre Elèctric completaron el cartel de esa jornada.
Como colofón, el domingo se celebró la Matiné - Sona Deleste Kids con entrada gratuita y las actuaciones de Astral Kids, Atlàntic, Joe Pask, Mamífero y Mr. Sanchez. Además, la vocalista Valeria Castro emocionó al público en un recital que contó con la colaboración de la Concejalía de Patrimonio y del Palau de la Música de València.
Entre las actividades paralelas, Bombas Gens acogió la inauguración con el proyecto 'Zócalo' de Laia Estruch, ganador del Premio Cervezas Alhambra de Arte Emergente 2022 entregado en ARCOmadrid el pasado febrero. La artista se aproximó al objeto escultórico como si se tratara de un dispositivo de producción sonora y experimentación vocal.
Además, el Museo de Bellas Artes se convirtió en un espacio de reflexión el viernes 28 por la mañana gracias a los Diálogos Deleste, en los que especialistas debatieron sobre cuestiones relacionadas con el arte, el diseño, la música, la sostenibilidad y el territorio.
La organización del festival ya ha empezado a trabajar en los contenidos de la edición de 2023, con lo que en breve anunciará las nuevas fechas.