Los famosos también saben de crisis
- Michael Jackson, Elle MacPherson, Kevin Bacon o Kevin Federline están padeciendo de primera mano las penurias económicas.
- Ni la fama ni el reconocimiento les conceden inmunidad.
Son famosos, pero también padecen en primera persona las consecuencias de la crisis económica. Sin ir más lejos, Michael Jackson, que ya tuvo que vender su rancho Neverland para hacer frente a sus deudas, tendrá que desembolsar 20 millones de dólares si prospera la demanda que la productora que organiza el tan esperado concierto de los Jackson Five cumple sus amenazas.
El cantante que un día fue negro se niega, a pesar de haberse comprometido, a regresar con sus hermanos, algo que no está dispuesta a tolerar AllGood Entertainment.
La top Elle MacPherson también anda haciendo números. No consigue vender su casa londinense ni rebajándole el precio (pide 9 millones de euros); el actor Kevin Bacon está sumido en una depresión desde que perdió gran parte de su capital con las fraudulentas operaciones financieras de Bernie Madoff...
Kevin Federline, por su parte, anda buscando una casa más pequeña porque está en la bancarrota. No le cuadran las cuentas con la pensión de 30.000 euros que su ex, Britney Spears, le pasa.
El que tuvo no retuvo
Pamela Anderson, que ingresó importantes cantidades cuando era vigilante de la playa, ha tenido que mudarse a una caravana. El ex boxeador Mike Tyson, famoso por sus excesos, llegó a deber 20 millones de euros; por no olvidarnos de Whitney Houston, a la que las drogas dejaron en la ruina. Kim Basinger tuvo que vender casi todas sus propiedades en los noventa, mientras que Lindsay Lohan se despidió de 2007 con su cuenta bancaria en blanco.