Marta Belaustegui: "El camino es la igualdad entre hombres y mujeres"
- La actriz dirige el festival 'Mujeres en dirección' de Cuenca.
- Se proyectan obras dirigidas por mujeres de todo el mundo.
- La cita concluye este sábado.
Hace tres años la UNED me invitó a hacer, en un curso de verano, un ciclo de cine de mujeres en Cuenca. Mientras comíamos, surgió la idea de hacer un festival exclusivo de cine femenino, ya que el ciclo tuvo una acogida muy buena. La idea gustó, tanto a los presentes como a las instituciones, y Cuenca era un escenario perfecto para un festival así. Todo el mundo estuvo a favor desde el primer momento.
Es apasionante. Recibir invitados constantemente, estar con directoras de lugares tan distintos del mundo. Aprendes mucho en el plano humano y en lo que respecta a la gestión. No es una labor de una semana: el Festival está vivo durante todo el año. Surgen ideas que discutimos en un consejo asesor. Buscamos tesoros por todos los festivales del mundo, discutimos la programación, ideamos talleres, ciclos...
Está siendo coherente. La esencia, la fuerza, son sus contenidos. Si dejamos de lado los contenidos
Las cineastas siempre hacen un cine valiente. Queremos asumir esa realidad, aunque sin olvidar la parte lúdica. Esto es una fiesta, pero también un lugar de debate, donde se escuchan las historias y los temas que las directoras nos quieren contar. Un Festival debe ser un espacio para el buen gusto: nos llegan historias bellísimas y de muchos puntos del mundo. Es una maravilla.
Crece cada año. Cuenca tiene un muy buen público de cine. La ciudad tiene un cineclub extraordinario, y abundan los cinéfilos. Por eso el Festival ha sido acogido con mucho cariño, lo han asumido muy pronto como algo suyo, que quieren mimar y cuidar. Era algo fundamental para que ésto funcionase.
Ojalá se convierta en un referente, incluso a nivel internacional. Las directoras que han ido pasando han dejado su sello, y sabemos que otras profesionales quieren venir tras hablar con gente que ha estado por aquí.
Es un debate habitual. Yo creo que el director, sea hombre o mujer, tiene que tener una mirada personal. Talento. Y una libertad absoluta, que no admita concesiones. Este Festival muestra los trabajos de gente con muchas dificultades para empezar, para mantenerse. Las estadísticas son evidentes: las directoras están en minoría. Son necesarias soluciones políticas, que se apliquen políticas de igualdad.
Evidentemente. Es una realidad. Hay pocas directoras, pero también pocas directoras de fotografía o responsables del sonido. En los lugares donde se toman las deciciones, muchas veces no hay mujeres. La paridad es necesaria. Así las miradas serán distinas y complementarias.
Entre largos y cortos proyectamos unas 25 obras, por lo que tenemos historias muy alejadas. Pero es cierto que hay un punto en común: hablar de los seres humanos. Hay 4 ó 5 películas que giran sobre la existencia, sobre cómo debe vivirse la vida. Pero también hay cine político, intimista, o comedias con mucho humor e ironía.
Me conformo con que lo haga el cincuenta por ciento. Creo que juntos podemos avanzar muchísimo. La presencia de la mujer en todos los campos es muy importante, porque aporta cosas muy positivas. El camino es la igualdad, y trabajar todos juntos, colaborando y compenetrándonos.
El documental
Es la mayor alegría del Festival. Cuando nacimos pensamos que Cuenca tendría que implicarse desde muchos lugares y que los talleres acercarían a los ciuadanos a cómo es el cine por dentro. Tenemos talleres para adolescentes, para universitarios o abiertos. De especialización, con cursos de maquillaje y peluquería. Videoarte, bandas sonoras, de guión, de animación... Recibimos muchas solicitudes para participar.