Arrancan las fiestas del Orgullo Gay reivindicando la visibilidad de las lesbianas
- La lectura del pregón la han hecho Eva Hache y Hugo Silva.
- Eva Hache ha rechazado los despidos, los problemas laborales y los acosos sexuales que sufren las lesbianas.
- Ambos han subrayado que este año hay que cumplir "el sueño lésbico, de existir en libertad y en igualdad, sin miedo".
Miles de personas, en su mayoría jóvenes, han abarrotado los alrededores del escenario ubicado en la madrileña plaza de Chueca para asistir a la lectura del pregón, muchas de ellas con camisetas, banderas, abanicos y otros adornos con los colores del arco iris, símbolo del orgullo gay y lésbico.El público
"Bollo a la vista"
Entre aplausos, Silva ha señalado que "2008 es el año de las lesbianas", mientras que Eva Hache ha resaltado que este año "todas las lesbianas -porque todas lo somos- nos hacemos visibles para decir ¡basta ya!, por favor". Las lesbianas "decimos basta a que se nos ignore en los medios de comunicación, a que se nos ningunee en las políticas destinadas a mujeres y a que nuestra sexualidad se niegue o se considere de segunda", ha apuntado Silva.
Eva Hache ha rechazado los despidos, los problemas laborales y los acosos sexuales que sufren las lesbianas "por la circunstancia de amar a otras mujeres". Ambos han subrayado que este año hay que cumplir "el sueño lésbico, de existir en libertad y en igualdad, sin miedo a ser, ni a parecer, desde la alegría, desde la fiesta y desde la reivindicación".
En lugar del lema "por la visibilidad lésbica" de la manifestación del Orgullo Gay del próximo sábado, los pregoneros han propuesto la consigna "bollo a la vista", que ha sido coreada por los asistentes.
Durante el acto, se ha rendido homenaje a la niña de 13 años de Sabadell que tuvo que cambiar de colegio a causa de las agresiones a las que la sometieron unas compañeras cuando supieron que era lesbiana.
La lectura del pregón se ha cerrado con el lema de las fiestas del Orgullo Gay 2008, "bollo a la vista", multiplicado por las voces del público, que también ha cantado y bailado al ritmo de la canción de Alaska A quién le importa.