Una pareja estadounidense llega a casa, pulsa el botón del contestador automático para escuchar los mensajes pendientes, pero lo que encuentra no son las llamadas habituales. Una de ellas procede del número de su hijo, y fue realizada durante un combate con insurgentes en Afganistán.
Sandie Petee ha
relatado a los medios estadounindeses el horror que sintió al reconocer
la voz de su hijo entre disparos y gritos desesperados. "Podías oirle decir cosas como 'necesito más munición' o 'necesito otro cañon'", explica la familia de Stephen Phillips, soldado estadounidense que realizó la llamada de forma accidental.
Al escuchar el mensaje,
la madre pensó que sería la última vez que escuchaba la voz de Stephen. Había disparos, gritos y peticiones desesperadas de munición. A los tres minutos, la llamada acaba de repente.
Poco después, lograron dar con él. "
Estaba avergonzado, nos pidió que no dejáramos a su abuela escuchar la grabación". Phillips tiene programado su regreso a EE UU el próximo mes de junio.
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