Burgos

El ciprés del Monasterio de Silos se somete a labores de poda y conservación

El ciprés del Monasterio de Santo Domingo de Silos se está sometiendo a una serie de labores de poda, limpieza y conservación, que previsiblemente concluirán la próxima semana. Ubicado en el jardín del claustro, fue plantado en 1882 y, en la actualidad, tiene veinticinco metros de altura.

El monje benedictino Alfredo, contable de la comunidad, explicó que "se están haciendo labores de poda y limpieza que hacía años que no se habían hecho". Así, "las ramas secas que tiene en su interior ha habido que cortarlas, fajarlo para que no se abra y las ramas caigan desparramadas hacia los lados y para que mantenga esa figura esbelta se han puesto elementos de fijación".

La realización de estos trabajos resulta "muy complejo" puesto que son veinticinco metros y se necesitan elementos fijos de sujeción para poder trabajar con fiabilidad, comodidad y seguridad. Por eso, explicó que se coloca un gran andamiaje. "Es costoso el acercarse a él ya que las arcadas románicas que circundan el claustro no permiten ningún acceso de maquinaria tipo grúa", apostilló.

Se trata de unas labores de poda, limpieza y conservación que se llevan a cabo por especialistas, concretamente, por los ingenieros agrónomos de un instituto valenciano de Conservaciones Agrarias, así como por los técnicos de la Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Medio Ambiente.

"El árbol goza de muy buena salud", afirmó.

Sin embargo, reconoció que "hace unos veinte años que hubo una serie de problemas porque no admitía el agua de riego que requería el césped que tenía el jardín del claustro" y tuvieron que intervenir. Los andamios se retirarán la próxima semana porque "no queremos evitar fotografías a los turistas que lo ven como algo tan figurativo de Silos", precisó. "El ciprés es casi el logotipo del Monasterio", concluyó.

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