Los mayores vuelven a clase para enseñar
Les sacan más de 50 años, pero los alumnos de 4.º de la ESO del instituto Francisco Sabater de Cabezo de Torres han escuchado entusiasmados a sus nuevos maestros.
Son cinco mayores del centro social que, desde noviembre, han acudido a clase para contar sus vivencias. «Tenéis que aprovechar lo que os dan. Vivía con mis cinco hermanos en una casa que se caía a pedazos y a los diez años me sacaron del colegio para ir a servir a casa de una señorita», relata Teresa Gris.
Mendrugos de pan
Los chavales miran con asombro a Teresa. Sueltan alguna carcajada cuando cuenta que cuando llegaba a casa con unos mendrugos de pan, eran felices. «Conocimos qué era el hambre».
También escuchan perplejos que Juan Arróniz se crió sin madre y que con seis años tenía que hacer las cosas de casa. De Lola Serrano se llevan el recuerdo de una luchadora. «Con tres hijos y 46 años me saqué el título de puericultora. Hay que estudiar y luchar por los sueños».
Así opinan
Francisco Torres: 65 años
«Ha sido una experiencia positiva. Creo que los jóvenes de hoy en día, como no han sufrido, se hunden con cualquier contrariedad».
Antonio Sánchez: 60 años
«Me ha encantado dar las charlas. Ha sido muy bueno. Los chicos han estado muy atentos, aunque han hecho pocas preguntas».
Lola Serrano: 70 años
«Les he querido transmitir ilusión para que sepan lo que tienen y aprendan a valorarlo. Tenemos una buena juventud y muy sana».