Dos detenidos por retener y amenazar de muerte a un hombre en su propio piso en Barcelona
- El hombre les había alquilado dos habitaciones que no pagaban y donde habían instalado una plantación de marihuana.
- Fue liberado gracias a que un vecino escuchó sus gritos de auxilio.
La Guardia Urbana de Barcelona ha detenido a una pareja por presuntamente retener de forma ilegal y amenazar de muerte a un hombre en su propio piso en el barrio de la Marina del Port, que les había alquilado dos habitaciones que no pagaban y donde habían instalado una plantación de marihuana.
Según ha informado la policía barcelonesa en un comunicado este miércoles, el hombre -no ha trascendido cuántos días estuvo cautivo- fue liberado gracias a que un vecino escuchó sus gritos de auxilio este lunes 13 de febrero y avisó a la Urbana.
Para abrir la puerta se necesitó de la ayuda de los Bomberos de Barcelona y los agentes le encontraron en un estado muy alterado y asustado, por lo que recibió asistencia médica en el lugar.
Según explicó la propia víctima a la Urbana tras ser rescatada, los dos detenidos, un hombre de 38 años y una mujer de 34, habían alquilado dos habitaciones en su piso pero poco después le habían dejado de pagar.
En un principio acordaron que podían seguir viviendo en la casa a cambio de encargarse de comprar comida, aunque un día decidieron encerrarle en su habitación y no dejarle salir.
La pareja le había quitado la documentación personal y bancaria, además de las llaves del piso, y habían bajado y bloqueado las persianas para que no pudiera pedir auxilio, además de amenazarle de muerte si le explicaba a alguien su situación.
Cultivo masivo
Los dos detenidos tenían en el piso una plantación de marihuana con una instalación para el cultivo masivo con instalación eléctrica, lámparas de fotocultivo y revestimiento aislante en las paredes.
Después de liberar a la víctima, los agentes se quedaron en el piso hasta que aparecieron los dos inquilinos, ya de madrugada, que fueron identificados y detenidos por presuntos delitos de detención ilegal, amenazas y coacciones.
Además, la policía municipal ha puesto en conocimiento los hechos a los servicios sociales para que puedan ofrecer asistencia a la víctima.