El Banco del Tiempo de Valladolid cumple diez años con casi 600 usuarios y 8.000 intercambios

El Banco del Tiempo de Valladolid, promovido por el Ayuntamiento, ha cumplido este mes diez años con 594 socios usuarios y casi 8.000 intercambios que han supuesto un total de 11.480 horas durante las cuales los vecinos han intercambiado servicios y tiempo de labores.

La concejal de Servicios Sociales, Rafaela Romero, ha hecho balance de este servicio que se puso en marcha en noviembre de 2005 y que, si bien no fue pionero ya que hay unos siete más antiguos en España, sí que fue uno de los primeros promovidos por un Ayuntamiento, junto al de Alicante.

Romero ha detallado que después de una década, el Banco cuenta con 594 socios y 14 asociaciones vinculadas. De los socios, la mayor parte son mujeres (358, frente a 222 hombres) con edades situadas, principalmente, en la franja de 31 a 40 años y en la de 51 a 60, si bien el usuario más veterano tiene 93 años. Del total, 31 socios son inmigrantes.

Desde su creación, los usuarios han realizado 7.890 intercambios, que han supuesto 11.480 horas, por lo que la media mensual es de 75 intercambios.

El Banco del Tiempo continúa con el mismo sistema de funcionamiento que en sus inicios. Las personas inscritas ofrecen un determinado número de horas mensuales, y a su vez pueden demandar el mismo número de horas para cubrir sus necesidades puntuales, de modo que cada socio es titular de una cuenta corriente de tiempo y dispone de un talonario personal cuyos cheques puede utilizar cuando desee o precise recibir un servicio.

En el Banco existen distintas modalidades de intercambios: individuales, entre personas inscritas en el banco, e intercambios grupales, que son los realizados por asociaciones o colectivos que pueden demandar servicios o tareas a otras personas o colectivos inscritos como socios.

Rafaela Romero ha considerado que percibe una "falta de conocimiento" por parte de la población de la existencia de este servicio, ya que entiende que "falta mucha comunicación". Por ello, ha recalcado que durante estos cuatro años se marca como objetivo dar un impulso a la promoción del Banco del Tiempo.

Romero ha recalcado que en estos diez años se ha mostrado como una forma "valiosa y distinta de relacionarse y hacer vecindad" y un "modelo de socialización que crea vínculos de relación humana" y al mismo tiempo permite resolver problemas cotidianos.

Actualmente existen en España 300 Bancos de Tiempo de los cuales sólo siete de ellos tienen diez años o más —San Javier (Murcia); Gracia, Raval, Bon Pastor en Barcelona; Sant Cugat del Vallés (Barcelona); Andre Berri (País Vasco), y Alicante. El de Valladolid es "uno de los más consolidados" y con mayor número de socios de todo el país.

Los bancos de tiempo pueden ser temáticos, dirigidos a colectividades de ámbitos específicos (universitario o empresarial) o comunitarios, circunscritos en un ámbito territorial concreto y abiertos al conjunto de la población, modelo este último que se implantó en la ciudad en 2005 y ha permitido la creación de redes de cooperación y ayuda mutua entre la ciudadanía.

En Valladolid se ofrecen multitud de servicios, de los cuales los más intercambiados son, entre otros, masajes, informática, peluquería, charla y clases de inglés, contactos para paseos o tomar café, costura, desplazamientos en coche o moto, reparaciones, apoyo escolar, limpieza y ayuda en el hogar, clases de música, planchado de ropa o cocina.

Recientemente, como ha explicado Romero el Banco del Tiempo se ha hecho cargo de la coordinación de la ayuda a refugiados en Valladolid, lo que ha tenido una "buena respuesta", pues se abrió el teléfono a las llamadas de la ciudadanía, que han ofertado en los últimos meses múltiples servicios y ayuda a los desplazados sirios como asesoramiento, acompañamiento, idiomas o asesoría jurídica, entre otras muchas.

También se ha abierto recientemente el Banco para las ofertas de ciudadanos que quieran acoger a niños saharauis el próximo verano.