Un ‘taxi-blog’, el mejor de 2006

El director de 20 minutos, Arsenio Escolar (izda.), y José A. Mtnez. Soler, director general de Multiprensa y Más, SL (dcha.), escoltan a Daniel Díaz.

Más de 400 blogueros se reunieron ayer en la mayor fiesta de la blogosfera hispana: los Premios 20Blogs, organizados por 20 minutos y celebrados en la sala Négone de Madrid. El premio más esperado de la noche, el que acredita a su ganador como la mejor bitácora de 2006, recayó sobre Daniel Díaz, autor del blog Nilibreniocupado (www.nilibreniocupado.es/blog), que retrata la vida de la ciudad desde el asiento delantero de un taxi. Díaz recibió 3.000 euros de premio y una invitación para colaborar como columnista en 20 minutos. Además, se llevó el trofeo en la categoría de Ciudad 20 Minutos. Por su parte, Duilio se alzó con el premio de 3.000 euros por Otro tiempo, mejor bitácora en la votación de los blogueros.

Los tres finalistas

Ni libre ni ocupado competía como mejor blog de 2006 en una votación secreta con Malaprensa y Fogonazos que, aunque no consiguieron ese premio, sí lograron hacerse con el trofeo en las categorías de mejor bitácora de Actualidad y de Ciencia, respectivamente.

La votación final fue «muy reñida», según los miembros del jurado. Todos los ganadores recibieron una estatuilla de bronce diseñada por el humorista gráfico Eneko.

Daniel Díaz «Lo que escribo sale de mi taxi»

¿Qué siente al ser el ganador?

No creía que fuera a ganar. De hecho, tenía otros blogs favoritos y los consideraba mejores que el mío.

¿Por qué empezó a escribir el blog?

Para conciliar mi profesión de taxista con mi mayor afición: la literatura. En un taxi se encuentran multitud de personajes literarios.

¿Cuánto tiempo le lleva?

Teniendo en cuenta que lo que escribo sale de mis experiencias con el taxi, le dedico toda mi jornada laboral.

¿Se ve parte de una comunidad de blogueros?

Sí, ningún blog tendría sentido sin el resto.

¿Alguna anédota provocada por su blog?

Muchos taxistas (que no conozco) me saludan por la calle alzando su pulgar. Me parece asombroso.

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