La actriz Lindsay Lohan reconoce su desintoxicación pero no su adicción
- Según Lohan pasó por el centro para "cuidar" de su salud
- Es conocida por su afición a las fiestas y las juergas nocturnas
- Ha sido reprendida en público por rendir poco en su último rodaje
Esta joven estrella de 20 años, que se dio a conocer como niña prodigio en películas como The Parent Trap, en los últimos años es más popular por su extrema delgadez y su afición a la vida nocturna.
Lohan ya había reconocido en enero su paso por el centro de desintoxicación Wonderland para "cuidar" su salud después de que saliera a la luz su asistencia a reuniones de Alcohólicos Anónimos.
Sin embargo la actriz, conocida también por su trabajo en los filmes Freaky Friday y Mean Girls, añade en el mensual que su paso por el centro no la hace "necesariamente una adicta".
"Siempre pensé que antes me moriría que ir a desintoxicación", explicó a la revista.
Sus declaraciones coinciden con la promoción de su nuevo estreno, Georgia Rule, película en la que trabaja junto a Jane Fonda.
Durante la filmación de esta cinta, Lohan recibió de la producción una dura reprimenda pública por retrasar el rodaje con sus supuestas enfermedades y ataques de cansancio mientras la prensa del corazón la fotografiaba noche sí y noche también de fiesta con sus amistades.
La actriz también ha recibido a lo largo de su carrera numerosas alabanzas como profesional, en especial del fallecido director Robert Altman y de la actriz Meryl Streep, con los que trabajó en uno de sus últimos estrenos, A Prairie Home Companion.