Ciudades para el verano: cuatro capitales asomadas al mar

Aunque el verano parece más pensado para disfrutar en playas y montañas, el turismo más urbano sigue siendo una buena opción, y más si esa ciudad en la que pasar unos días está asomada al mar.

Aunque podríamos dedicar toda una vida a descubrir sus rincones secretos, lo cierto es que unos pocos días pueden ser suficientes para conocer la esencia de Bilbao, Santander, Tarragona y Valencia.

Bilbao, nuevo y vanguardista

El buque insignia de la transformación de la ciudad, ya se ha dicho mil veces, ha sido el Museo Guggenheim. Su edificio, ejemplo de la arquitectura más vanguardista del siglo XX, es el nuevo símbolo de Bilbao. Más ejemplos en esta línea son el Bilbaoarte o el Museo de Reproducciones Artísticas en la Iglesia del Corazón de María.

Santander, la palaciega

En Santander, frente a una impresionante bahía natural, la modernidad convive una ciudad tranquila. Uno de los mejores lugares para contemplar el Mar Cantábrico es el Palacio de la Magdalena, antigua casa de verano de los Reyes de España. En su casco urbano, destacan, entre otros, la Catedral, el Gran Casino o la plaza Porticada.

Tarragona, romana

El Imperio Romano dejó muchos tesoros en la Península, y eso lo sabe bien Tarragona. Las huellas romanas persisten tras más de 2.200 años. De modo que hay que recorrer y descubrir los monumentos de la antigua Tarraco. De paredes restauradas o del muro original surgen piedras romanas con sus inscripciones y bajorrelieves. También hay que ver la Catedral de Santa Tecla, de fachada gótica.

Valencia, clásica y moderna

También aquí tenemos dos ciudades: la clásica y la moderna. Podemos recorrer su casco antiguo y el cauce del río Turia recuperado, pero también la Ciudad de las Artes y las Ciencias.

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!