Vivienda

Cómo mantener espléndidas nuestras plantas de interior

Decoración con plantas bulbosas en el interior.
GTRES

Plantas y flores son un gran complemento en cualquier hogar. Dan un aire acogedor y fresco, decoran y personalizan por muy poco dinero. Ya apuntábamos su uso como una de las buenas ideas para decorar la casa con poco dinero. Debemos acertar en su elección.

Las plantas de interior son las que, viniendo de hábitats de clima cálido o suave, son capaces de vivir en zonas más frías como la nuestra en el interior de nuestros hogares. Esto es posible gracias a la temperatura que tenemos dentro de casa.

En Anida, han hecho una lista de las mejores especies vegetales para cultivar en el interior de nuestro piso:

  • Plantas con altura para habitaciones grandes: ficus, kentia, areca, schefflera o raphis.
  • Plantas medianas: zamioculca, chamaedorea, dracaena, espatifilo, espidistra o sanseviera.
  • Plantas colgantes: helechos, cintas o cisos.
  • Plantas pequeñas o para centros de mesa: orquídeas, plantas crasas o aloe vera.

Cómo cuidar nuestras plantas

En general las plantas de interior necesitan bastante luz pero no suelen admitir exposición solar directa, pues se quemarían y se pondrían las hojas marrones. Tampoco se recomienda tener plantas en zonas con corrientes de aire. La mayoría suelen acusar bastante estas corrientes con la caída de sus hojas o la falta de frondosidad.

En cuanto a la humedad que requieren, lo ideal es que se rocíen con agua mediante un pulverizador para imitar la que tendrían en su lugar de origen. Para contrarrestar la falta de esta humedad ambiental en lugares secos tendremos que incrementar la cantidad de agua de riego, pero con moderación y siempre que notemos que las puntas de las hojas se empiezan a secar. Siempre hay que tocar primero con los dedos el sustrato o la tierra, y evitar dejar la planta encharcada.

Es conveniente añadir fertilizante o abono líquido al agua de riego para que a nuestras plantas no les falte ningún nutriente. Se suele hacer cada 15 días pero siempre hay que seguir las recomendaciones del fabricante en función de la época del año.

Además de valor estético, tener plantas en nuestra casa tiene muchos beneficios para nuestra salud:

  • Limpian y renuevan el ambiente. Con la luz solar las plantas realizan el intercambio de gases, absorben el dióxido de carbono y expulsan oxígeno, reduciendo los niveles de gases tóxicos y  purificando el aire que respiramos.
  • Reducen el polvo y los ácaros suspendidos en el aire e incrementan la humedad ambiental. Contribuyen, también, a la absorción de gases nocivos presentes en el humo del tabaco.
  • Reducen el ruido de la estancia donde se encuentren.
  • Generan sensación de bienestar, tienen un efecto relajante y a la vez ayudan a la concentración.
  • Son muy indicadas en oficinas y lugares de trabajo con aparatos electrónicos pues absorben las radiaciones emitidas por éstos y la electricidad estática.
  • Dormir con una planta en el dormitorio no es perjudicial ni tóxico.