Comer a buen precio es casi un requisito… en los tiempos que corren. La oferta gastronómica en nuestro país es tan amplia que no faltan locales que conjugan amplia y variada oferta con precios razonables. Son una buena solución si en San Valentín queremos quedar bien.
Los restaurante del Grupo Vips están muchas de las principales capitales españolas. En su carta figuran seis tipos de hamburguesas; 7 sándwiches; y entrantes como aros de cebolla, croquetas, quesadillas y alitas de pollo.
Lateral es otra cadena en crecimiento. Combinan los sabores españoles más tradicionales (croquetas de gambas y de jamón, el pan con aceite y tomate o la tortilla de patatas), con otros más internacionales (sashimi de salmón con soja y wasabi o la provoletta).
En De María el protagonista es la carne, el asado argentino y todo lo que pueda pasar por la parrilla. Y todo con chimichurri (perejil, ajo, aceite, vinagre, ají y sal).
En Barcelona, el Bar Lobo, del Grupo Tragaluz, es una buena opción. Está ubicado en El Raval, muy cerca de La Rambla. También está Fastvínic: bocadillos que reivindican los sabores propios catalanes. De embutidos locales hasta de lomo con mostaza y miel, pollo y perdiz a la vinagreta. La carta de vinos tiene 24 marcas de las 12 denominaciones de origen catalanas.
En San Sebastián, Ganbara es un restaurante con más de 25 años de historia. Hoy como ayer ofrecen una selección alternativa de pintxos. Chipirones en su tinta, brocheta de rape y langostinos, revuelto de hongos y gambas son solo tres de sus clásicos.
Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!
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