Internacional

El primer ministro libio es liberado tras ser secuestrado por antiguos rebeldes

El primer ministro de Libia, Alí Zeidan, a su llegada a un evento con el primer ministro británico, David Cameron, el 17 de septiembre de 2013.
Andy Rain / EFE

El primer ministro libio, Alí Zeidan, ha sido liberado después de permanecer unas horas secuestrado por un grupo de antiguos rebeldes vinculados al Ministerio de Interior. Zeidan se dirige a la sede del Gobierno, según ha anunciado el jefe de seguridad de Trípoli, Hashem Bisher, y han asegurado "fuentes fiables" citadas por la agencia de noticias estatal, LANA.

Zeidan ha estado en poder del departamento contra el crimen de la Policía, donde estaba "bien de salud" y "tratado como cualquier otro ciudadano", según informó el portavoz del departamento a la agencia estatal de noticias.

El Gobierno había informado este jueves un comunicado del secuestro de Zeidan por un posible antiguo grupo rebelde, la Sala de los Revolucionarios Libios. La cadena estadounidense CNN detalló que unos hombres armados sacaron al primer ministro del Hotel Corintia para llevárselo en un convoy de coches.

En un primer momento, un ex grupo rebelde reivindicó la autoría y explicó que obedecía a la operación llevada a cabo por las fuerzas especiales de Estados Unidos en el país árabe para detener al supuesto líder de Al Qaeda Nazih al Raqi, alias Abu Anas al Libi, según la cadena Al Yazira.

Dicho grupo armado aseguró que actuaba "por orden de la Fiscalía"y anunció que seguirá persiguiendo a "todos" los que ayudaron a Estados Unidos, según la BBC.

Ante esos rumores que apuntaban a que no habría sido secuestrado, sino detenido por la Policía, el fiscal general de Libia, Abdelqader Radwan, negó que el Ministerio Público hubiese emitido una orden de arresto contra Zeidan, según Al Arabiya. Radwan ha declarado que la detención del primer ministro es "un crimen" y que los que lo han cometido deben ser "castigados".

Libia vive una gran inestabilidad desde la caída del régimen de Muamar el Gadafi, el 20 de octubre de 2011, debido, sobre todo, a la negativa de las milicias que ayudaron a derrocarlo a entregar las armas y unirse a las fuerzas regulares.

Para hacer frente a esta situación, el nuevo Gobierno ha reconocido a algunas milicias —uniéndolas en la brigada Escudo de Libia y poniéndolas bajo la supervisión de los ministerios de Interior y Defensa—, pero otras siguen al margen de su autoridad.