Salamanca, cinco planes con mucha marcha

Salamanca es una ciudad que sabe conservar su esplendoroso pasado y a la que le gusta vivir el presente de la mano de su animosa y abundante población universitaria, que la mantiene joven y dinámica. Salamanca pudiera parecer un inmenso decorado de cine cuidado con todo detalle; un decorado que saben hacer suyo los más jóvenes.

De tapas

Salamanca cuenta con una rica cultura de bares, donde se pueden degustar deliciosas tapas o pinchos. Destacan los de carne de cerdo a la parrilla, siendo muy característicos el pincho moruno, la costilla en salsa, los filetes de lomo tierno, el chorizo asado o al vino, el jamón ibérico asado o la jeta (corteza de cara de cerdo).

Para marchosos

Un local para descubrir la noche salmantina es la discoteca Camelot, situada en la conocida calle de Bordadores. Si tenemos suerte, podremos encontrar allí un espectáculo de flamenco o de cualquier grupo de música actual.

Para los de la rana

En la plaza de Anaya, tan solo al pasar la calle Calderón de la Barca, encontramos el Patio de Escuelas Menores, con la fachada del edificio central de la Universidad de Salamanca. Y aunque no lo sepamos, veremos a muchos turistas buscando una rana… esculpida en la fachada. Una pista si no queremos perdernos en ese entramado de piedra: la rana está sobre una calavera. Y tiene su sentido. La rana simboliza el pecado, de modo que si el alumno no se centraba en sus estudios, la rana podía llevarle a la muerte (la calavera).

Para "astronautas"

La NASA no tiene base alguna en Salamanca pero en las piedras de la ciudad ha escondido un astronauta. La Catedral Nueva de la Asunción de la Virgen, del siglo XV, de estilo gótico pero con detalles del Renacimiento y del Barroco, es una de las más grandes de España. En los relieves de su fachada y los de la Puerta de Ramos, en uno de sus laterales, podremos ver un astronauta esculpido sobre la roca. Se trata de una licencia que se tomó en la restauración realizada en 1992.

Para una cena divertida

Si lo que queremos es pasar una velada divertida, no hay nada en Salamanca como el restaurante Tormento, donde gozaremos de una cena con gastronomía más que creativa, todo ello amenizado por un espectáculo de desenfadadas drag queens con las que no pararemos de reír a carcajada limpia

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!