Madrid ‘is very beautiful’

20 minutos quiso comprobar como andan de inglés los taxistas madrileños ante el anuncio del Ayuntamiento de obligarlos a que aprendan el idioma para tener la licencia.

En otro trayecto, una sonrisa responde a un educado good morning ante el sonrojo del conductor. En este caso, y pese al rodeo, el taxista comprende que el destino es la estación de Atocha. Ni un ápice de inglés Mientras tanto, en la Carrera de San Jerónimo, el chófer muestra los monumentos. «Aquí el Congreso, al fondo los Jerónimos», pero claro, nada en english.

Ante tanta maravilla, la falsa turista no puede por menos que soltar un «¡qué bonito!» con un maltrecho acento, ante lo que el taxista, logra esbozar un «Madrid is very beautiful».

Otra carrera transcurre en silencio. El conductor muestra interés por la procedencia de la pasajera y aunque eleva la voz y se afana en vocalizar no pronuncia ningún vocablo anglosajón.