Valcárcel dice que Latbus tendrá que reestructurar sus servicios porque las administraciones no pueden sostener ayudas
El presidente del Gobierno regional, Ramón Luis Valcárcel, ha considerado que la empresa de transporte público Latbus tendrá que hacer una "reestructuración y racionalización" de sus rutas y servicios ante la situación de crisis económica actual, que impide a las administraciones públicas mantener la cuantía de sus subvenciones.
En el tradicional contacto veraniego con los medios de comunicación, Valcárcel ha apostado por unificar las líneas que "van vacías" y que cubren por ejemplo, el viaje a una pedanía, de forma que se reforme su servicio y el autobús cubra en su trayecto otras pedanías en las que "embarque más gente", todo ello empleando "el sentido común".
En este sentido, se ha preguntado "por qué se va a exigir a una empresa que esté un autobús de un lado a otro sin pasajeros", y considera que es "bastante más racional" reducir las frecuencias de siete a dos un domingo, cuando el autobús "viaja prácticamente vacío". Esta posibilidad permitiría "llenar un autobús y hacer rentable su servicio".
De todas formas, ha afirmado que la subida de tarifas del billete de autobús y la supresión de la simplificación tarifaria en Murcia ha sido "una decisión unilateral de la empresa" Latbus, a la que ha emplazado a negociar y que "tiene que hacer un gran esfuerzo". Al respecto, Valcárcel ha advertido que los poderes públicos no están "para aceptar unos precios imposibles".
En este sentido, se ha negado a hablar de la gestión del Ayuntamiento de Murcia en este asunto, ya que no le gusta "invadir terrenos de nadie", igual que ha dicho que le disgusta que alguien "invada terrenos" de su responsabilidad.
"historia" de lo sucedido
El presidente autonómico se ha remontado al origen de la actual situación, y ha recordado que hubo un momento en el pasado en el que la empresa aplicaba la tarifa "tal y cual", y si había que pagar cien pesetas "se pagaban cien pesetas". Para que esto no ocurriera, ha recordado que las administraciones públicas decidieron "subvencionar un transporte que tiene carácter público".
Para este fin, el Ayuntamiento aportaba nueve millones de euros al año, lo que suponía un abaratamiento del billete para el ciudadano. Posteriormente, se pidió a la Comunidad que hiciera un esfuerzo y se incorporara a la subvención, habida cuenta de que tenía rutas que iban más allá de los límites municipales, por lo que el Gobierno regional decidió aportar tres millones de euros.
Valcárcel ha recordado que firmó con el Ayuntamiento el convenio para financiar el transporte público, lo que suponía un total de 12 millones de euros de ayudas.
Sin embargo, ha explicado que sobrevinieron circunstancias de carácter económico que "hicieron revisar a la baja la cantidad aportada por el Ayuntamiento, de forma que se decidió que el Consistorio disminuyera su aportación a cinco millones de euros, y que la Comunidad redondeara los 12 millones aportando otros dos millones de euros".
Posteriormente, el Ayuntamiento de Murcia decidió retirarse "de todo", y la Comunidad, por la situación de crisis, no podía mantener los cinco millones de euros que estaba aportando y que, desde luego, era "imposible del todo" aportar el total de 12 millones de euros.
Y es que el Ayuntamiento de Murcia "ha dicho que no tiene capacidad económica para aguantar esta situación, al tiempo que ha sacado a concurso nuevamente la concesión del servicio de transporte público en el municipio", puntualiza Valcárcel, quien añade que "hay una complejidad que va más allá del aspecto puramente económico".
En este sentido, reconoce que la Comunidad también ha tenido que rebajar en dos millones aproximadamente su aportación a Latbus, "como en otras tantas cosas".
Al no tener subvención del Ayuntamiento, y la aportación de la Comunidad es poca, Latbus "ha decidido aplicar el coste real del billete al viajero", añade.
Valcárcel ha afirmado que su Ejecutivo "ha negociado mucho con Latbus" e, incluso, ha tenido "incomprensiones" con el Ayuntamiento de Murcia para tratar de "sacar adelante esa situación". Por ello, no considera "justo" que se piense que el Gobierno autonómico "ha estado de brazos cruzados".