Los tesoros de Mauritania esperan a ser redescubiertos

  • El turismo dejó de llegar al país por miedo al terrorismo en el Sahel.
  • Las antiguas ciudades de Chinguetti, Ouadane, Tichit y Oualata son ya parte del Patrimonio Mundial de la Humanidad.
  • El visado de entrada cuesta 152 euros a los turistas franceses, la mayoría.
Fachada de una casa de Oualata.
Fachada de una casa de Oualata.
FLICKR/c.hug
Fachada de una casa de Oualata.

Hasta no hace mucho, los turistas viajaban desde el frío norte hasta Mauritania en busca de paisajes desérticos y verdes oasis. Pero desde hace unos años, por culpa del terrorismo en el Sahel y el consiguiente miedo, las cosas han cambiado.

El turista, preferentemente europeo, ha optado por países más seguros. Hasta el Rally París-Dakar, dejo de celebrarse en el continente africano por las mismas razones.

Pero hay que volver a Mauritania, un país que posee muchos paisajes desérticos con dunas de arena dorada, verdes oasis a los pies de las montañas y una rica herencia cultural.

Ciudades Patrimonio Mundial

Por algo será que las antiguas ciudades de Chinguetti, Ouadane, (norte), Tichit (centro) y Oualata (este), han sido clasificadas por la UNESCO como Patrimonio Mundial de la Humanidad.

El atractivo de estas ciudades hace imprescindible que sean habilitadas para los viajeros, se adapten la calidad de los alojamientos y se mejore el transporte público para que los turistas puedan visitarlas con facilidad.

Otro de los problemas para que el turismo se anime a visitar Mauritania es más doméstico. El alto coste del visado de entrada al país: 152 euros en el caso de los franceses, la mayoría de los turistas.

Más seguridad, más turismo

Las cifras de la Oficina Nacional de Turismo (ONT) apuntan que 50.000 turistas llegaron en 2010 a Mauritania en vuelos regulares y por los puntos terrestres de entrada de Nuadibú (frontera norte del país), Diama y Rosso (frontera con Senegal).

Oficialmente, el turismo contribuye con un 1,5% del Producto Interior Bruto de Mauritania, pero la ONT considera que la cifra está muy por debajo de la realidad.

Para poner fin a la crisis del sector, la ONT desarrolló en 2010 un plan de marketing que intenta impulsar la oferta turística y expandirla a nuevos países como Bélgica, Alemania, Italia, España y EEUU, además de los asiáticos.

Paralelamente, el gobierno realiza un esfuerzo sostenido y constante para reforzar la seguridad en todas las partes del país, sobre todo en los lugares frecuentados por extranjeros, ya sean turistas, inversionistas u otros.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento