Un estudio invita a las bodegas a ahondar en el potencial del enoturismo para comercializar el vino
Un estudio sobre las bodegas de Rioja les invita a "ahondar en el gran potencial del enoturismo para comercializar el vino", en palabras del presidente del Club de Márketing de La Rioja, Ignacio Blanco. En el estudio destaca, también, que el 87 por ciento de las bodegas cree que hace falta promoción, pero sólo un 33 por ciento quiere financiarla.
'Gestión, comercialización y mercados en las bodegas elaboradoras de la DOC Rioja 2009-2010' ha sido elaborado por el Club de Márketing de La Rioja, con el apoyo del Consejo Regulador, y financiado por el Gobierno de La Rioja.
Se analizan cuestiones como la imagen de marca, los sistemas de gestión, la comercialización, canales y mercados o la comunicación y el enoturismo en las bodegas elaboradoras de Rioja.
Se trata, explicó el consejero de Agricultura, Iñigo Nagore, en rueda de prensa hoy, de un instrumento "necesario para detectar las carencias de forma segmentada y dar respuesta a los problemas".
Entre estos se encuentra la necesidad de potenciar el enoturismo, dado que los datos indican que sólo el 25 por ciento de las bodegas usa Internet para generar visitas; solamente un cuarto está abierta todos los días para recibir clientes y, además, se presenta como handicap el idioma y, por tanto, la imposibilidad de recibir clientes en su habla.
El estudio se ha realizado a partir de trescientas encuestas y una veintena de entrevistas, además de que se mantuvieron ocho foros de discusión. Las conclusiones se presentarán al sector en una jornada abierta al debate.
Las bodegas riojanas tienen su punto fuerte en la producción y, por este motivo, el estudio apunta la necesidad de reforzar áreas como la gestión y la comunicación, que permitan desarrollar planes estratégicos en diferentes áreas (comercial, marketing, formación, I+D, o de recursos humanos) a más largo plazo.
Y es que, para Blanco, las bodegas "siempre se han preocupado por la producción". Sin embargo, "además de tener un producto excelente hay que comercializarlo" y esto choca con el hecho de que el 58 por ciento no tiene vendedores y un 57 por ciento de los cosecheros no cuenta con distribuidores.
La presencia de personal comercial en las pequeñas bodegas es testimonial, aunque un 35 por ciento de las medianas disponen de departamento comercial.
Un 74 por ciento de las bodegas medianas y grandes exporta a Europa -mercado que acapara el mayor porcentaje de ventas de Rioja-, pero solo la mitad tiene una persona dedicada a este área, por lo que se confirma que la gestión está en manos de la gerencia o del área de comercial nacional.
La apertura y el creciente peso de la marca Rioja en los mercados asiáticos y en Estados Unidos requieren también una cualificación del personal de las empresas en idiomas.
La generalizada percepción positiva de la marca Rioja refuerza la necesidad de seguir incrementando los esfuerzos en promoción. Así lo creen más del ochenta por ciento de las bodegas, aunque al ser consultadas sobre su disposición a aumentar su aportación, un 66 por ciento no lo apoya y un trece no lo considera necesario.
Respecto al uso de las nuevas tecnologías o el diseño de una planificación estratégica, el estudio señala que no existe comercio ni marketing electrónico sino comunicación electrónica, ya que las operaciones comerciales (pedidos y pagos) en la red se sitúan por debajo del cincuenta por ciento.