Los historiadores de Arte Joan Fuguet y Carme Plaza han localizado en Fontfreda (Francia), rastreando en internet, la escultura de un caballero yacente expoliada hace más de un siglo del castillo de la localidad tarraconense de Santa Coloma de Queralt.
La escultura, denominada El yacente de Bell-lloc, datada en el siglo XIII y que representa a uno de los primeros barones de Santa Coloma de Queralt, desapareció de su ubicación entre finales del siglo XIX y principios del XX, cuando diversas piezas del castillo de Santa Coloma de Queralt fueron expoliadas.
Según explican Fuguet y Plaza en un comunicado, El yacente de Bell-lloc es una escultura que representa a un caballero vestido con el arnés de guerra propio de finales del siglo XIII. De la escultura tenían como referencia una fotografía, que el también historiador Martí de Riquer publicó en 1968 en su obra El arnés del caballero, armas y armaduras medievales catalanas.
La escultura, a finales del siglo XIX, formaba parte de una colección de obras de arte de los Queralt, recogidas por el capellán Esteve Puig, propietario por entonces del castillo, que las exponía en un museo dentro de su casa. Pero entre finales del XIX y principios del XX diversas obras de esta colección fueron desapareciendo del castillo por causas aún desconocidas.
Más de un siglo después y rastreando por azar en internet, Fuguet y Plaza dieron con esta escultura en el monasterio cisterciense de Fontfreda, la casa madre de su homólogo de Poblet.
El monasterio francés pertenece a los señores de Andoque, y el abuelo de la actual propietaria, Christiane d'Andoque, adquirió El yacente de Bell-lloc y, tras restaurarlo, forma parte del patrimonio nacional galo. Según diversas fuentes, pudo ser entre 1905 y 1914 cuando la casa de Andoque compró la escultura a un marchante español.
Pero ésa no es la única pieza de gran valor que desapareció en aquellos tiempos de Santa Coloma de Queralt. También se perdió de vista el retablo de Els Sants Joans y el artesonado azul, así denominado por el color predominante en la habitación en la que se encontraba en el santuario. La Junta de Museos de Barcelona compró el retablo en 1932 y se expone en la actualidad en el MNAC.
El artesonado y un balcón los adquirió, según explican Fuguet y Plaza, el coleccionista estadounidense Charles Deering, que los utilizó para decorar el palacete Maricel de Sitges (Barcelona). Y, mientras el artesonado fue trasladado a Estados Unidos, el balcón todavía es visible en la fachada de ese edificio de Sitges, ahora reconvertido en museo. "Esperamos que algún día el azaroso internet nos aclare el paradero del artesonado azul", señalan Fuguet y Plaza.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios