Corta ya con los cables

Las primeras tecnologías inalámbricas estaban basadas en infrarrojos y radio. Los infrarrojos tienen el inconveniente de que, al tratarse de luz, los dispositivos que se quieren conectar deben ‘verse’ sin que haya paredes de por medio. Ése es el motivo principal por el que se han impuesto los dispositivos por radio, que recientemente han evolucionado a la tecnología Bluetooth, la que utilizan los móviles para comunicarse a través de sus manos libres.

Proliferan los kit que permiten conectar un emisor a cualquier aparato de sonido y escucharlo con unos cómodos auriculares y una batería. Además, si mientras escuchamos música suena el teléfono, en los auriculares multifunción bastará con pulsar un botón y los cascos se cambiarán a modo móvil.

Conexión a Internet

Lo mejor en conexiones por el aire es el WiFi, o también WLAN, una conexión de alta velocidad que permite comunicar entre sí varios ordenadores, o a los terminales con su punto de enlace a Internet. Si tienes un portátil con WiFi y vas a contratar una línea ADSL, pide un router WiFi (gratuito en muchos casos) y podrás navegar sin cables.

Otros aparatos que se pueden conectar sin cables son las agendas electrónicas o PDA (mediante Bluetooth o WiFi), los joystick y pad para juegos (Bluetooth), y hasta las cámaras digitales.

Escritorio sin cables.

Los teclados y ratones hace tiempo que se venden en versiones sin cables, y actualmente también son Bluetooth. Algunos modelos están diseñados para poder usarlos desde el sofá mientras el contenido del ordenador se ve en la tele. Aunque los hay de diferentes precios, a partir de 30 euros puedes comprarte un escritorio sin cables.

El causante.

El Bluetooth se inventó buscando un sistema de bajo consumo para los auriculares de los teléfonos móviles, pero su uso se ha extendido a la informática y se emplea para conexiones con dispositivos cercanos . Se está trabajando en versiones que lo mejorarán.