Silvia Pérez Rodrigo: "Lo más importante en el cáncer de mama es que lo detectemos los radiólogos antes de que notes tú ningún bulto"

Silvia Perez Rodrigo.
Silvia Pérez Rodrigo.
Cedida
Silvia Perez Rodrigo.

Prevenir el cáncer de mama sigue siendo un gran reto en la actualidad. Por eso, Silvia Pérez Rodrigo, jefa de radiología mamaria del MD Anderson Cancer Center de Madrid, nos actualiza cómo se encuentra el cáncer de mama hoy en día, algunas maneras de detectarlo a tiempo y dónde hay que poner el foco para que las investigaciones continúen yendo por el buen camino.

¿El cáncer de mama presenta una tendencia ascendente o descendente?La incidencia del cáncer de mama ha aumentado en los últimos años. Las principales causas son el aumento poblacional, el envejecimiento y una serie de factores modificables como el estilo de vida (consumo de tabaco o alcohol), la dieta (consumo de grasas saturadas y procesados), el ejercicio y el aumento de los tratamientos hormonales. También, se ha visto un aumento significativo en la incidencia del cáncer en mujeres jóvenes que, en muchas ocasiones, se asocia a tumores de mayor agresividad. Estos, en algunos casos, se relacionan con mutaciones genéticas, mientras que otros dependen de estímulos hormonales. 

¿Qué es lo que provoca ese estímulo hormonal?Cuanto mayor sea el tiempo de exposición a dichas hormonas o mayor sea su cantidad, el riesgo será superior. La menarquia precoz, la menopausia tardía, la disminución en el número de embarazos y el retraso de la maternidad, asociada en muchos casos a tratamientos de fertilidad y de fecundación in vitro, aumentan el riesgo de padecer un cáncer de mama. Es decir, cuanto más tiempo estés sometida a lo largo de tu vida a un ambiente hormonal de estrógenos y progestágenos, más posibilidades habrá de recibir este diagnóstico.

Antes mencionó algunas causas que pueden favorecer la aparición del cáncer de mama, pero ¿hay más?Existen factores modificables como el estilo de vida que contribuyen directamente al riesgo de cáncer de mama. Sin embargo, alguno que poca gente conoce son la densidad mamaria, la exposición previa a radioterapia torácica y la influencia del microambiente tumoral. Las pacientes con mama densa o muy densa en mamografía tienen hasta 5 veces más probabilidades de padecer un cáncer de mama que las que tienen mamas no densas. Pero es que, además, también aumenta el riesgo de que, si tienen un cáncer de mama, este no se detecte. En el caso de la exposición a radioterapia torácica el riesgo aumenta hasta un 20 %, y se consideran a estas pacientes de alto riesgo al igual que las que tienen mutaciones genéticas. El microambiente tumoral favorece unas condiciones adecuadas para que las células malignas proliferen y se reproduzcan en lugar de permanecer estables y, en este sentido, tiene un papel importante el sistema inmune y la respuesta que desarrolla frente a la presencia de un cáncer. De hecho, actualmente hay un tipo de cáncer de mama que se trata en algunos casos con inmunoterapia, es decir, con fármacos que estimulan el funcionamiento de nuestro propio sistema inmune con resultados fantásticos.

¿El cáncer de mama es el más frecuente entre las mujeres?Sí, el cáncer de mama es el tipo tumoral más frecuente entre las mujeres de nuestro país (por delante del cáncer colorrectal, útero, pulmón y ovario). En España, supone el 30 % de todos los cánceres en mujeres. En 2020 se diagnosticaron un total de 34 088 nuevos casos, lo que supone una probabilidad estimada de desarrollar cáncer de mama siendo mujer de 1 de cada 8.

¿Cómo podemos prevenir el cáncer de mama?La prevención pasa por adoptar hábitos de vida saludable, pero, a pesar de todo, es posible que no puedas evitarlo. De hecho, aunque mucha gente lo desconoce no es un cáncer solo asociado a la mujer, sino que los hombres también pueden padecerlo. Es fundamental, por tanto, la prevención secundaria, es decir, que si te toca se detecte a tiempo. La forma de lograrlo es con revisiones sistemáticas con la mamografía que ha demostrado aumentar la supervivencia. ¿Por qué? Pues porque cuanto antes detectemos el cáncer más posibilidades tenemos de que sea pequeño y no se haya extendido a otras partes del cuerpo. Eso supone un tratamiento quirúrgico menos agresivo y menor probabilidad de necesitar quimioterapia. Lo recomendable es realizar una mamografía anual a partir de los 40 años.  A pesar de todo, hay que ser consciente de que cada mama es diferente y que las mamografías también tienen sus limitaciones y no lo ven todo. Por eso, hay pacientes que en función de su tipo de mama en mamografía y sus antecedentes personales y familiares puede que necesiten otro tipo de pruebas complementarias. Recientemente, han adquirido cada vez más importancia pruebas diagnósticas como la Resonancia Magnética y la mamografía con contraste intravenoso porque son pruebas funcionales, es decir que no solo nos enseñan cómo son las lesiones por fuera, sino cómo funcionan por dentro.

¿Es importante la autoexploración?Sí, la autoexploración está muy bien y todos los clínicos insisten en ella. Si tú conoces tu mama y te exploras habitualmente, si surge algo que no se ha visto en la mamografía, cuanto antes te lo detectes y más pequeño sea, mejor. Pero, lo que es mejor es que tú no lo veas, no lo notes y lo detectemos los radiólogos con las pruebas de imagen. Esto sería lo ideal. Ahora bien, hay una serie de síntomas de alerta. Un bulto nuevo que no desaparece después de la regla, que te salga líquido rojo o marrón por el pezón, que notes un hoyuelo en la piel, que el pezón se meta hacia dentro, que tengas la mama roja o inflamada, un bulto en la axila, un cambio de tamaño repentino o un cambio de consistencia. Estas son señales para acudir al médico lo antes posible. 

¿Es alta la supervivencia tras el diagnóstico?Sí, muy alta, rondando aproximadamente el 85-90  %. Aunque, hay que tener en cuenta algunos factores como, por ejemplo, la detección en estadio temprano antes de que aparezca la metástasis, es decir, antes de que se haya extendido a otras partes del cuerpo. Aun así, las investigaciones están avanzando mucho en los casos de pacientes metastásicas y en su supervivencia. Por eso, es tan importante que lo detectemos los radiólogos antes de que notes tú ningún bulto, porque cuando la paciente lo nota es porque ya es grande y esto quiere decir que el tratamiento será más agresivo, con más probabilidades de recibir quimioterapia, lo que afectará más a la calidad de vida.

¿Qué alternativas hay a la quimioterapia y cirugía convencionales?En los casos de tumores hormonales localizados o tumores triples negativos y HER 2+, también localizados y de pequeño tamaño, es posible evitar la quimioterapia. Por eso, la mejor alternativa es un diagnóstico precoz. En algunos casos concretos de tumores triples negativos se administra inmunoterapia, que llega a lograr, en un alto porcentaje de casos, que el tumor desaparezca por completo. En los tumores HER2+ se utilizan, asimismo, terapias específicas frente a este tipo de receptor, logrando resultados espectaculares. También, se están realizando tratamientos percutáneos (con una pequeña incisión en la piel) para no tener que operar si no es necesario o evitar una mastectomía tras un tratamiento con quimioterapia con una respuesta completa o casi completa. Hay ensayos clínicos a nivel mundial en los que hay algunos cánceres poco invasivos que se tratan con una biopsia asistida por vacío de forma percutánea, crioterapia o con radiofrecuencia. Lo que se busca es disminuir la agresividad de los tratamientos y personalizarlos en cada caso.

¿Qué esfuerzos se están llevando a cabo para mejorar la detección temprana del cáncer de mama?Desde los años 90, el programa de cribado poblacional en España se lleva entre los 50 a 69 años cada 2 años. Esto es así porque el cáncer de mama es un tipo de tumor que suele aparecer entre los 35 y los 80 años, aunque la franja a partir de 50 es la de mayor incidencia y, por tanto, el cribado es más efectivo y más eficiente, también en cuestión de dinero. Pero, la realidad es que el cáncer de mama ha cambiado mucho desde entonces, con una tendencia ascendente y un aumento significativo en mujeres jóvenes y, sin embargo, los programas de cribado prácticamente no lo han hecho, al menos no en la mayoría de las comunidades autónomas. Por ello, uno de los principales esfuerzos es reducir la edad de cribado y muchos de los estudios científicos, actualmente, así lo avalan. Lo ideal sería a partir de los 40 años y, de hecho, en algunas comunidades ya lo están haciendo. Pues, estamos viendo muchos casos de cáncer en mujeres en la franja de edad de 40 a 50 años. Otro de los esfuerzos está dirigido a aumentar la edad de cribado en función del estado de cada paciente. Es decir, actualmente hay pacientes que a pesar de ser mayores de 70 años presentan una estupenda calidad de vida y tienen una estimación de vida mayor que hace años, por lo que un diagnóstico precoz a estas edades supondría tratamientos llevaderos y poco agresivos. A nivel institucional se deberían entender 2 cosas: una, que las técnicas diagnósticas actuales han mejorado mucho y logran resultados cada día mejores gracias a los sistemas de inteligencia artificial y dos, que un diagnóstico tardío no solo es un fracaso, sino que también es un coste importantísimo para el sistema de salud. En este sentido, los sistemas de inteligencia artificial nos permiten no solo diagnosticar mejor, sino que también calcular el riesgo individual de cada paciente de tal forma que en un futuro a lo mejor una paciente debe realizarse controles cada año mientras que otra puede hacérselos cada 3 con los mismos resultados. Cada vez cobra más importancia la personalización del cribado.

¿El cáncer de mama es uno de los más investigados?Sí, es un cáncer muy investigado, pero en España todavía queda mucho que hacer. Hay que dedicar fondos a la investigación y hay fármacos aprobados en otros países que se conoce que son efectivos y que aquí no llegan por lo lenta que es la burocracia. Esto es una pena y tendría que cambiar. No podemos esperar 3 años a que llegue un medicamento que en otros países ya están utilizando y es eficaz. 

¿Qué mensaje le gustaría dar a las mujeres?Uno de los mensajes fundamentales es que acudan a centros especializados de mama donde se les realice un adecuado diagnóstico y manejo del cáncer, donde los profesionales sean específicos de mama. Desde el punto de vista radiológico, es importantísimo que no se salten las revisiones periódicas con la mamografía, que es la que va a mejorar su supervivencia y va a permitir que se diagnostique el cáncer a tiempo. Las mujeres tienen que conocer su riesgo de padecer cáncer de mama y conocer también su tipo de mama en mamografía, es decir, su densidad mamaria o, como yo digo habitualmente, su DNI mamario. Pocas conocen que esto es algo que los radiólogos de mama especificamos siempre en el informe de la mamografía, ya que va a determinar no solo su riesgo, sino también la necesidad de realizar pruebas complementarias. Las animo a pedir y leer sus informes radiológicos y que si tienen dudas hablen con su radiólogo de mama al igual que hacen con el ginecólogo. Además de esto, es muy importante abordar el diagnóstico y el tratamiento desde un punto de vista multidisciplinar donde los médicos de las diferentes especialidades debatimos cada caso y el manejo más apropiado del mismo. Desde el radiólogo, el patólogo, el cirujano o ginecólogo, el médico nuclear, la gestora de casos, el oncólogo médico y el oncólogo radioterapéutico. Y por supuesto no olvidemos la labor realizada por los cirujanos plásticos en la reconstrucción de la mama que permite también una mejor recuperación psicológica de las mujeres, así como la función que realiza el psico-oncólogo para lograr un tratamiento realmente integral y multidisciplinar.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento