La gama más alta de BMW en el segmento de las berlinas, la Serie 8, se pone al día. Los cambios afectan a todas las carrocerías, esto es, Coupé, Gran Coupé y Cabrio, que a partir de ahora no esconden para nada su talante deportivo y parten de serie con el paquete M Sport, lo que se une a una parrilla más voluminosa que se puede iluminar, pero muy distinta al diseño vertical de los últimos lanzamientos de la marca como el Serie 4 o los eléctricos iX.
La introducción del paquete M Sport varía en función de la mecánica, y eso incide, por ejemplo en las llantas, que pueden ser de 19 o 20 pulgadas, y en el equipo de frenos. También se ofrecen luces LED adaptativas de serie, cuatro nuevos colores para la carrocería y elementos específicos con decoración diferenciada, como faros oscurecidos, pinzas de freno o alerones, que se asocian con los paquetes M Sport Pro o M Performance.
En el interior, los cambios afectan al volante, asientos o tapicerías, siempre con el toque deportivo de M Sport, y el sistema multimedia BMW Live Cockpit Professional de serie pasa a contar con una enorme pantalla central de 12,3 pulgadas frente a la anterior de 10,25. También forma parte del equipamiento original la llave con pantalla incorporada, el Head-Up Display, el climatizador automático de cuatro zonas, integración y carga inalámbrica de smartphones y el asistente de aparcamiento con cámara de visión trasera.
A ello se une un completo surtido de ayudas a la conducción mejoradas, como el reconocimiento de señales de tráfico y los avisos de cambio de salida de carril. Otros elementos como el control de crucero activo o el asistente automático de límites de velocidad son opcionales.
La gama mecánica, común a todas las carrocerías, continúa siendo la misma que hasta ahora, con el motor gasolina de seis cilindros en línea y 333 caballos como “entrada”, el que dinamiza al BMW 840i y que se desdobla con una versión de tracción total xDrive. En el siguiente escalón está el potente V8 de 530 CV del M850i xDrive, también con cuatro ruedas motrices, y en diésel se mantiene el 840d xDrive con motor microhíbrido (con etiqueta Eco) de seis cilindros en línea y 340 caballos de potencia. En todos los casos el cambio es un Steptronic automático de ocho velocidades.
Por su parte, el M8 Competition sigue encabezando la gama y se actualiza en las tres carrocerías con las mismas variaciones en la parrilla y en el sistema multimedia, lo cual se une a su amplio equipamiento específico de serie. No cambia el colosal motor V8 de 4,4 litros y 625 caballos, que en el caso del Coupé le permite acelerar de 0 a 100 km/h en solo 3,2 segundos. Esta mecánica está asistida por un cambio M Steptronic y el sistema de tracción total M xDrive desconectable.
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