Mercedes-Benz 260 D
También codificado por la marca en su momento como Mercedes-Benz W 138, este modelo fue el primer vehículo con motor diésel en salir de una cadena de producción en serie, en 1935.
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Mercedes-Benz 260 D
Se produjeron cerca de 2.000 vehículos de este modelo hasta 1940, que fue el año de inflexión. En este momento, el grupo Daimler-Benz se dedica de manera íntegra a la fabricación militar hasta el final de la II Guerra Mundial.
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Mercedes-Benz 260 D
El 260 D recibe este nombre por la capacidad cúbica de su motor. Equipaba un 2545 cc OM138 I4 diésel, con un sistema de inyección de combustible diésel Bosch que producía 45 CV (34 kW) a 3000 rpm.
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Mercedes-Benz 260 D
Este coche pesaba cerca de 1.530 kilos y podía alcanzar una velocidad máxima de 95 kilómetros por hora.
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Mercedes-Benz 260 D
Su estética respondía claramente a los estándares de la época y cientos de estas unidades fueron utilizadas única y exclusivamente como taxis. Destaca el gran frontal, tan característico de esos años.
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Mercedes-Benz 260 D
Cuando Daimler-Benz recuperó la producción en serie una vez finalizada la II Guerra Mundial, fue el modelo 350 SD el que se encargó de recoger el testigo del 260 D, quedando este relegado a una única unidad superviviente que se expone en el museo de la casa en Stuttgart, Alemania.
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