Deportes

Soldado evita el caos

Soldado celebra eufórico el tanto que suponía el triunfo madridista.
Victor Lerena/E.F.E.
Por primera vez el Madrid jugaba con lógica, bien: líneas juntas, presión, incluso corriendo, concepto tabú. El Olympiacos, una madre, hacía el resto en pro de la notable primera parte blanca, plagada de ocasiones y culminada –que no rematada, error– con el cabezazo a la red de Raúl, primer goleador madridista en esta competición con 50. Todo lo contado pareció espejismo en la segunda mitad. Empató Kafes y llegaron las prisas. Luxemburgo acudió a Soldado y éste salvó la papeleta europea al borde del abismo.