Fernando Hierro: "La palabra fracaso no entra en mi vocabulario"

Han pasado ya más de dos años y medio desde que Fernando Hierro empezara a lucir traje y corbata por las oficinas de la Federación Española de Fútbol, en donde ejerce como director deportivo de la selección. Con él en el cargo, España ha saboreado la gloria a nivel europeo, ha superado con éxito la transición Aragonés - Del Bosque y buscará consolidarse a lo largo y ancho del planeta en el próximo Mundial de Sudáfrica. Y, todo ello, con él trabajando en la sombra.

¿Le ha cambiado mucho la vida?

Bastante. Cuando dejé el fútbol, hice un curso de dirección deportiva y después me saqué el título de máximo nivel de entrenador. El acuerdo con la Federación fue muy rápido.

Así que no le dio tiempo a sentir esa 'morriña'...

No (risas). Lo que sí hice, y creo que hice bien, fue no pararme, no quedarme en casa viendo partidos sólamente. En esos dos años y pico me preparé, me relacioné con la gente del fútbol, desde niveles más bajos, y conocí otro fútbol.

¿Lo mejor y lo peor de estos dos años con la selección?

Lo mejor es estar rodeado de profesionales del mundo del fúbol y, lo peor, estar encerrado en un despacho durante tanto tiempo. Son muchas horas reunidos y nosotros, los futbolistas, somos de estar al aire libre.

¿Qué siente al ver a España en lo más alto de la clasificación mundial?

El placer del trabajo bien hecho. Ahora no podrán decir que caeremos como siempre en cuartos. Eso ya lo hemos roto.

Aragonés, Del Bosque... ¿Y el trabajo de Hierro en este equipo?

Lo mío es lo de menos. Me dedico al funcionamiento interno, a coordinar a todas las selecciones y a todos los seleccionadores, y estar con los chavales. En dos años y medio hemos cambiado el 85% de los seleccionadores entre todas las categorías y todo con normalidad y naturalidad.

¿Vamos 'crecidos' a este Mundial?

Es algo con lo que tenemos que convivir con naturalidad. Somos los vigentes campeones de Europa y todo el mundo nos da un plus más. España está entre las siete mejores del mundo, pero un Mundial es muy difícil y a partir de octavos no se puede fallar. Creo que por primera vez, y ahora de verdad, estamos entre las mejores.

Tras la Copa Confederaciones, ¿necesita el proyecto de Del Bosque reafirmarse con el Mundial?

No se tiene por qué reafirmar, porque nuestro proyecto está consolidado. Estamos muy a gusto con el seleccionador, con su forma de trabajar, de ser y de vivir el cargo que tiene. Con una media de jugadores de 25 años, los que tenemos que estar tranquilos somos nosotros. El Mundial marcará, eso sí, el destino de muchos jugadores.

Entonces, ¿no cree que sería un fracaso caer en cuartos?

La palabra fracaso no entra en mi vocabulario. Depende de muchos factores, pero si se lucha y se da todo, no se puede hablar de fracaso.

¿Preocupa cómo llegarán los jugadores?

Eso se verá. Tenemos que preparar muy bien la previa mundialista y los amistosos. A partir de ahí espero que Del Bosque lo tenga muy difícil para configurar el once titular.

Una terna de selecciones favoritas al título...

Yo veo a Argentina, Brasil, Inglaterra, Costa de Marfil... con España, claro. Habrá alguna sorpresa también.

¿No le llama el banquillo?

Tengo el título de entrenador, pero mi gran labor aquí es proponer a los seleccionadores. Es ese aspecto, quería saber cómo piensan ellos desde otro prisma, no desde la de jugador.

¿No le ha hecho el Real Madrid ninguna oferta?

Fui internacional durante 13 años y tenía mucha confianza en la selección. Así que fue sentarme en una mesa y firmar todo en 10 minutos. Poco más que decir y que pensar, ni siquiera en el Real Madrid.

Raúl ahora tiene otro papel en el Real Madrid. ¿Qué le aconseja para cuando ponga fin a su carrera deportiva?

Yo no le voy a aconsejar a Raúl. Yo opino de mi experiencia y, cuando me fui, estuve dos años feliz. Claro que me habría gustado terminar mi carrera en el Madrid, pero yo me fui donde quería a poner muchas cosas en su sitio.

Es decir, hay vida después del Madrid...

Yo tenía 35 años, esa es la diferencia con Raúl. Él es muy fuerte mentalmente y la decisión que tome la llevará a cabo con todas las consecuencias.

Usted que ha levantado las útimas 3 Copas de Europa en el Madrid, ¿qué cree que le falta al equipo para volver a ser grande en la Champions?

Son seis años consecutivos cayendo en octavos y la gente este año tenía mucha ilusión por jugar la final en casa. Por eso la Champions debe ser el reto para el año que viene.

BIO (23/3/1968, Málaga) Debutó en Primera División en el año 1987 con el Real Valladolid y, tras dos temporadas allí, recaló en el Real Madrid, equipo en el que jugó hasta el 2003. Un año más en el Al-Rayyan y otro en el Bolton completan sus 18 temporadas en activo. Tiene un palmarés envidiable: 5 Ligas,  3 Copas de Europa, 1 Copa del Rey, 4 Supercopas de España, 1 Supercopa de Europa y 2 Intercontinentales. Además, fue 89 veces internacional con España.