Granollers y Ferrer se meten en las semifinales del Valencia Open

Los tenistas españoles Marcel Granollers y David Ferrer lograron situarse en las semifinales del Valencia Open 500, torneo puntuable para el circuito de la ATP, después de derrotar respectivamente en los cuartos de final al francés Gael Monfils (7-6(12), 3-6, 6-4) y Nikolay Davidenko (6-3 y 6-4).

De este modo, el catalán sigue con su particular idilio en el Ágora, nuevamente volcado con el barcelonés, que ya está a solo un paso de repetir la final de 2010 en la capital del Turia, donde cayó ante su compatriota David Ferrer. Además, aprovechó para vengar su única derrota con Monfils, producida en este torneo en 2009.

Y todo después de otro 'maratón' y ante otro rival peligroso en este tipo de pistas. El jueves, dos horas y 13 minutos para remontar al croata Marin Cilic, que venía de ganar en San Petersburgo (Rusia), y en esta ocasión, después de casi dos horas y media ante el tercer cabeza de serie.

Desde el principio, los dos tenistas ofrecieron un juego de alto nivel, y donde pese a la solidez con su servicio, los 'breaks' se sucedieron. Así, el español tomó rápidamente ventaja, pero su rival respondió, intercambiaron dos roturas por lo que tuvo que ser una larga 'muerte súbita' la que dictaminara sentencia, a favor del español, que se impuso por 14/12.

La pérdida del set provocó la reacción de Monfils, pese a su irregularidad con el saque (10 'aces' y 8 dobles faltas). El francés ofreció su mejor versión, mientras que el barcelonés intentó resistir, pero cedió su saque en la única concesión que le dio al francés, que forzó el tercer y definitivo parcial.

En éste, la iniciativa volvió a ser del finalista en 2010, que rompió a las primeras de cambio, y se puso 5-3 y saque para finiquitar el choque. El galo apretó desde el resto y le devolvió el 'break' a un jugador español, que pedía una aparición del 'fisio', que finalmente no sería necesaria porque Granollers forzó y volvió a lograr una rotura que le dio el billete a las semifinales donde se medirá a del Juan Martín del Potro, que eliminó a Sam Querrey (6-3 y 6-4).

Por su parte, el tenista alicantino David Ferrer doblegó al ruso Nikolay Davydenko en dos sets (6-3, 6-4), en un encuentro en el que 'Ferru' fue muy superior y que le aproxima a la final de un torneo donde defiende título.

Ferrer comenzó a un gran nivel el encuentro y ya en el cuarto juego, ganando 2-1, consiguió un 'break' que le ponía en clara ventaja. Con un saque muy sólido consiguió poner contra las cuerdas de nuevo el saque del tenista ruso en el sexto juego, en el que tuvo la oportunidad de prácticamente sentenciar el set.

Sin embargo, el de Jávea no consiguió romper el saque de un Davydenko que no dejó de luchar en ningún momento y que a continuación igualó el encuentro devolviendo el 'break' a Ferrer. Cuando parecía que el ruso podría poner en problemas a 'Ferru', el alicantino resurgió de sus cenizas y consiguió de nuevo romper el saque de Davydenko y no fallar con su servicio para adjudicarse la primera manga por 6-3.

El 'local' no quiso relajarse en el segundo set y saltó de nuevo a la pista con la misión de finiquitar el encuentro. En el quinto juego de nuevo un rocoso Ferrer consiguió doblegar el saque de Davydenko, por lo que solo conservando su servicio tenía la oportunidad de adjudicarse el partido.

El tenista ruso pudo igualar la segunda manga cuando, con 4-3 a favor de Ferrer y saque para el de Jávea, puso contra las cuerdas al español, pero desperdició esa gran oportunidad y concedió la oportunidad a 'Ferru' de cerrar el partido con su siguiente servicio.

Ferrer no desperdició esa oportunidad y, sin pasar apuros, consiguió ganar su saque y sentenciar el duelo por 6-4. El español se enfrentará en semifinales al argentino Juan Mónaco, que eliminó en cuartos al español Juan Carlos Ferrero, uno de los copropietarios del torneo, por un doble 6-3, en 1 hora y 36 minutos.

El propio Ferrero había reconocido antes de este partido que debía elevar el nivel de su tenis en este torneo si quería pasar a semifinales, pero no lo hizo. El valenciano no acabó nunca de encontrar la continuidad a su juego, mientras que Mónaco sí que fue más consistente y aprovechó a la perfección las oportunidades que tuvo.