¿Qué hace un dominicano en los 400 m vallas?
La verdad es que, como todos los jóvenes de mi país, empecé jugando al béisbol. No me separaba nunca de la pelota.
Bastante bien, pero tuve que dejarlo por una lesión de muñeca y me pasé al atletismo, pero he practicado desde fútbol hasta lucha libre.
Todo comenzó cuando me fui a vivir a Los Ángeles con mi madre. Quería echar una mano al equipo de atletismo de mi instituto y todos los puestos estaban bien cubiertos menos las vallas, así que empecé un poco por obligación y otro poco por necesidad.
El atletismo comienza a tener auge en la República Dominicana tras mi triunfo en los Juegos de Atenas. Muchos jóvenes saben ahora que los dominicanos podemos destacar en cualquier deporte, y estoy abierto a toda iniciativa que signifique potenciar el atletismo en mi país.
Me gustaría ser un ejemplo, un espejo en el que se mire la juventud de toda Suramérica.
¿Qué siente cuando le comparan con Edwin Moses?
Un orgullo enorme. Es lo más grande que ha dado el mundo en 400 m vallas y compararme con él es todo un honor, aunque debo trabajar mucho más para estar a su altura.
Arrastro algunas lesiones, pero volveré a ser el de los Juegos de Atenas.
Félix Sánchez, Superfélix, como se le conoce, fue campeón mundial de 400 m vallas en Edmonton 01 y París 03. Campeón olímpico en Atenas 04.