'Sin tiempo para morir': Daniel Craig se resistió a aprobar la canción de Billie Eilish para la película

A sus 53 años, es normal que Daniel Craig lo tenga un poco difícil para apreciar a un ídolo 'GenZ' como Billie Eilish. Incluso aunque la joven diva haya entregado un tema tan clásico como No Time To Die, su canción para los créditos iniciales de Sin tiempo para morir. 

Según Stephen Lipson, productor musical de la película, al intérprete de James Bond le costó pillarle la gracia a la canción de Eilish. Concretamente, a Craig le hicieron falta dos escuchas del tema antes de reconocer que este se hallaba a la altura de su despedida como 007.

"Lo más importante era conseguir la aprobación de Daniel", explica Lipson. "Al principio él no estaba seguro de que la canción proporcionara el clímax emocional necesario para su última película como Bond, así que tenerle contento era la clave. Le sugerí que viniese a mi estudio, porque sabía que, comparado con cualquier otro lugar, ese era el mejor entorno sonoro para escucharlo". 

Así pues, Stephen Lipson usó el viejo truco de los productores discográficos: enfrentar al reticente Craig con todo el poder de unos buenos monitores de audio. "Hice que Daniel se sentara en la silla entre los altavoces, le di al 'play' y esperé a su reacción. Cuando acabó la canción, no apartó la mirada, sino que nos pidió que la pusiéramos otra vez". 

"Barbara [Broccoli, productora de la franquicia) y yo no sabíamos qué le había parecido hasta que terminó su segunda escucha", continúa el productor. "Entonces, me miró y dijo algo así como 'Esto es jodidamente increíble". 

De esta manera, concluye Lipson, la canción de Eilish fue aprobada como tema oficial de Sin tiempo para morir, y la cantante americana pudo hacer historia convirtiéndose en la artista más joven que ha aportado una canción para una aventura de James Bond. 

Aun así, si Craig no hubiera dado su brazo a torcer, Billie Eilish no se merecería ningún reproche. Porque la franquicia de espías más popular tiene tantos temas gloriosos en sus créditos como canciones, igualmente estupendas, que fueron rechazadas.