En la cuna del lechazo y el vino de la Ribera

La Villa de Peñafiel es el centro de de la comarca situada en una encrucijada de caminos y culturas, a 56 km de Valladolid capital en dirección este y al pie de un impresionante castillo del siglo X, que se alza sobre una loma estrecha y larga que le da la forma de barco

Conocida como el balcón del Duero, es cuna del lechazo y los buenos caldos de la Ribera. Dos ríos, uno grande y otro chico, han determinado desde siempre la fisonomía de Peñafiel. El Duero cruza estas tierras de oriente a poniente y el Duratón de sur a norte, que llenó de molinos, huertas y puentes el corazón del mismo pueblo.

El restaurante Molino de Palacios está ubicado en un viejo molino del siglo XVI restaurado en 1995, que conserva su configuración de anaño.

La gastronomía castellana, platos típicos, vinos de crianza, gran reserva y repertorio forman la carta en un asador de buena y abundante comida casera.

Molino de Palacios ofrece un interior muy agradable e interesante gracias, además, a las exposiciones de pintura que allí se organizan. Situado en una zona privilegiada de Peñafiel, dispone de horno de leña y de 2 salones con capacidad para 140 personas.

Ya es tradición la convocatoria en otoño de las jornadas de Caza y Setas. Una ocasión para probar platos exquisitos y originales de setas y caza, acompañados de una amplia carta de vinos de la Ribera del Duero.

En su carta, el resto del año, resaltan como especialidades: el lechazo churro asado, los níscalos a la molinera, las setas de temporada, la caza menor con los escabechados de de pavo y perdiz, el arroz con conejo o liebre o el pollo de corral.