Sacar los objetos de la pantalla: la próxima revolución de la tecnología táctil

  • GHOST cuenta con la participación de cuatro socios de Reino Unido, Países Bajos y Dinamarca y ha recibido una financiación de 1,93 millones de euros.
  • "Mediante tecnología de levitación por ultrasonido, podríamos proyectar fuera de la pantalla plana objetos. Y, con pantallas deformables, podríamos también insertar los dedos en su interior", dicen sus desarrolladores.
Ejemplo de hasta dónde GHOST podría cambiar el mundo de las pantallas táctiles.
Ejemplo de hasta dónde GHOST podría cambiar el mundo de las pantallas táctiles.
GHOST
Ejemplo de hasta dónde GHOST podría cambiar el mundo de las pantallas táctiles.

El proyecto GHOST (Generic, Highly-Organic Shape-Changing Interfaces) lleva en desarrollo desde 2013 y puede convertirse en una de las próximas revoluciones en la tecnología de pantallas táctiles.

Respaldado por la UE y desarrollado por universidades de Reino Unido, Holanda y Dinamarca, este programa está dejando imágenes espectaculares sobre lo que puede llegar a suponer; 'sacar' los objetos fuera de la pantalla con las manos.

Según sus desarrolladores, los objetos podrán sentirse al tacto. "Mediante tecnología de levitación por ultrasonido, por ejemplo, podríamos proyectar fuera de la pantalla plana lo que se muestre en la misma. Y, con pantallas deformables, podríamos también insertar los dedos en su interior", explicó en un comunicado Kasper Hornbæk, uno de los responsables del proyecto GHOST.

Pantallas que cambian de forma y se pueden tocar y sentir. Nos encontramos ante un adelanto revolucionario en la forma de interacción del usuario con la tecnología que permitiría manipular objetos e incluso datos de un modo radicalmente nuevo.

De este modo, por ejemplo, un cirujano podría intervenir físicamente en un cerebro virtual, disfrutando de una experiencia táctil plena, antes de llevar a cabo la operación de verdad. Por su parte, diseñadores y artistas que suelen emplear sustitutos físicos como la arcilla podrían moldear objetos una y otra vez y guardarlos en un ordenador a medida que trabajan.

Los investigadores de GHOST trabajan también con interfaces deformables, como esponjas y alfombrillas, que un músico podría flexionar para controlar el timbre, el tempo y otros parámetros al crear música electrónica.

De hecho, el equipo de GHOST ha creado una cadena de montaje de prototipos con los que mostrar distintas aplicaciones caracterizadas por ese cambio de forma. Un prototipo es Emerge, que permite sacar de la pantalla los datos de gráficos de barras sencillamente con las yemas de los dedos.

Esa información —por ejemplo, los resultados de unos comicios o unos patrones de pluviometría— se podría reorganizar y desglosarse por filas, columnas o individualmente para asimilarla mejor. Los investigadores del proyecto vienen trabajando también con 'morphees', dispositivos móviles flexibles con pantallas de lycra o aleación que pueden estirarse o doblarse en función de su uso.

Así, pueden cambiar de forma automáticamente, por ejemplo para impedir que se vean los dedos del usuario cuando va a teclear una contraseña o desplazar la pantalla conforme a los giros y quiebros de determinado juego. Estos dispositivos pueden también aumentar su tamaño cuando se sostienen en la mano, para que se vea mejor la información, y después encoger de nuevo para que quepa mejor en una funda o un bolsillo.

La Universidad de Bristol, asociada a GHOST, ha constituido una empresa llamada UltraHaptics que ya emplea a doce personas y que se dedica a desarrollar en mayor medida una tecnología estudiada en este proyecto que consiste en la emisión de ultrasonidos para crear sensaciones en el aire. Esta empresa ya ha captado capital inicial en el Reino Unido y fondos adicionales a través del programa Horizonte 2020.

"GHOST ha logrado progresos considerables por el mero hecho de reunir a varios socios y darles la ocasión de poner en común sus descubrimientos apunta el profesor Hornbæk. Es probable que dentro de apenas cinco años existan ya pantallas que cambien de forma durante su uso. Ahora bien, sí que falta algo más de tiempo para que uno pueda proyectar un paisaje con su smartphone a veinte o treinta centímetros fuera de la pantalla, ¡pero estamos en ello!", apunta el profesor Hornbæk.

GHOST, que acaba a finales de este año, cuenta con la participación de cuatro socios de Reino Unido, Países Bajos y Dinamarca y ha recibido una financiación de 1,93 millones de euros en virtud del programa para Tecnologías futuras y emergentes de la Unión Europea.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento