¿Prefieres volver a ver 'The Wire' en vez de 'La conjura contra América'? David Simon te responde

Esta semana acabó la emisión de La conjura contra América, la miniserie de David Simon y Ed Burns que adapta la novela de Philip Roth de 2004, ambientada en unos EE UU que abrazan el fascismo en la Segunda Guerra Mundial. A pesar de tratarse del nuevo trabajo del creador de una serie tan reverenciada como The Wire, no es que esta ucronía haya arrastrado a las masas a seguirla en HBO. Pero eso no preocupa mucho al creador ahora mismo.

En una entrevista reciente con Vanity Fair, David Simon aborda de lleno el hecho de que a pesar de que The Wire se ha solidificado como un referente cultural, sus producciones siguientes no han corrido la misma suerte. Ni siquiera parecida. "Me divierte la terca realidad de que a pesar de que tengo una miniserie en marcha ahora mismo, La conjura contra América, a la que he dedicado los últimos tres años de trabajo, y la gente se pone a ver The Wire, o habla de ver The Wire. Es un poco contradictorio", afirma Simon.

Pero que quede claro que se lo toma con buen humor. "Me tengo que reír", prosigue. "Quizás dentro de cinco o diez años la gente se ponga a ver La conjura contra América. Y, si sigo haciendo series de televisión entonces, pasarán de lo que esté sacando en esos momentos. Me da la impresión de que nadie ve lo que hago cuando se emite por primera vez".

Como Simon bien sabe, The Wire tardó bastante tiempo en convertirse en el gran fenómeno de aceptación crítica y popular del que gozó una vez que fue elevada a la gran serie de calidad de la primera década del siglo XXI. "Cuando empezamos a hacer The Wire, ni siquiera se pensaba todavía en el mercado de los cofres de dvd", recuerda Simon. "De hecho, las dos primeras temporadas ni siquiera salieron en dvd hasta que se empezó a emitir la tercera".

"[Con The Wire] no anticipamos los dvds ni, por supuesto, el streaming", sigue recordando el creador en referencia a la apuesta por una narración continua con arcos de temporada expansivos que practicaron en The Wire. "Nos lanzamos a un mundo que no estaba listo para lo que estábamos haciendo. Pero rápidamente llegó a ese punto".

"Sabíamos que corríamos riesgos. ¿Qué pasaba si los espectadores se perdían la serie dos semanas y se perdían? Desarrollábamos muchas historias y la televisión no es realmente un medio como para ponerse al día a cada hora", explica Simon. "Así que básicamente rechazamos el modelo dominante [de narraciones episódicas autoconclusivas] y decidimos escribirla como un libro. Escribir la mejor historia posible y tratar los episodios como los capítulos de un libro".

"Pudimos hacerlo solo gracias a la fuerza de HBO, y a que repetían cada episodio cuatro o cinco veces a la semana después de su primera emisión", recuerda.

Simon sabe que el mundo y los hábitos de consumo audiovisual han cambiado mucho desde 2002-2008, periodo de emisión de The Wire. Que ha día de hoy siga siendo una de las series más elegidas para pegarse atracones dice mucho a su favor; incluso aunque la gente la elija por delante de las posteriores Treme, The Deuce o La conjura contra América, claro.

"Creo que, con el streaming y las descargas, incluso antes con los dvds, la televisión se ha convertido un poco en una biblioteca", reflexiona Simon. "La película está descubriendo Treme ahora, o The Deuce. Son series que hace tiempo que acabaron. Pero considero que si consigo hacerlas, es como poner un libro en la estantería: llegará el momento en el que gente que lo busque acabarán encontrándolo".