Un perro fue pillado 'in fraganti' por su dueño mientras hacía travesuras. El can, que tenía ganas de calmar el hambre o, simplemente, de jugar con lo primero que se topara por su camino, focalizó su atención en dos huevos que había ante sus ojos. Fue a por ellos, pero sus intereses se vieron truncados tras ser sorprendido por su compañero con los objetivos en la boca. Antes de que este descubriese las verdaderas intenciones de su amigo canino, inmortalizó la tierna imagen del animal al ser encontrado en plena acción: el hocico de la mascota retomó su forma original tras caer los dos huevos que se 'escondían' entre los colmillos. El momento continúa con la mirada tímida del animal, que podría traducirse en una amable disculpa.